Una milagrosa escapada tuvo un niño que cayó a un pozo de casi tres metros de profundidad en la población Don Bosco de Valdivia.

Paolo Ignacio Acosta Castillo, de 9 años volvía la tarde de este martes desde el Colegio Adventista a su casa, ubicada en calle Tamarindo.

Al querer acortar camino, pasó por una población que está en plena construcción, en el sector de Don Bosco, donde sorpresivamente cayó a un pozo de más de dos metros de profundidad, con agua y lodo.

Sus gritos alertaron a vecinos del lugar que llamaron a Carabineros. Al lugar llegó personal de la Tenencia Los Jazmínes, entre ellos, el cabo segundo Daniel Gonzalez, quienes lograron rescatar al asustado estudiante.

Erma Castillo, madre del menor, llegó rápidamente al Hospital Regional de Valdivia para ver su hijo Paolo. Agradecida de la labor de Carabineros, sólo cree que un ángel guardián impidió que algo peor le ocurriera al niño. Sin embargo, cuestionó duramente las medidas de seguridad adoptadas en torno a la población en construcción

Carabineros tomó la denuncia de la mujer e informará de ello al departamento de obras municipales, como explicó el capitán Cristian Hauesntein

Personal del hospital revisó a al pequeño Paolo, quien afortunadamente sólo presentaba un cuadro de hipotermia, tratado de forma inmediata por los funcionarios policiales.