Los países de la Unión Europea (UE) decidieron el martes imponer controles de resistencia a sus centrales nucleares ante eventuales sismos, tsunamis y ataques terroristas, tras el accidente en Japón.

El comisario europeo de Energía, Günther Oettinger, anunció la decisión tras una reunión extraordinaria en Bruselas con representantes de los gobiernos europeos, las autoridades nacionales de seguridad nuclear y la industria del sector para sacar las lecciones de lo sucedido en la central japonesa de Fukushima.

Los controles serán organizados lo antes posible, dijo el comisario, precisando que “en las próximas semanas, la Comisión elaborará sus propuestas” para los países miembros de la UE, donde existen unos 150 reactores.

“Se trata de reexaminar los riesgos de tsunamis, ataques terroristas, sismos y cortes de electricidad”, según Oettinger.