Los goleadores chilenos Humberto Suazo y Héctor Mancilla se verán las caras este fin de semana cuando el campeón Monterrey reciba a los Tigres en el clásico del norte del fútbol mexicano, el partido más atractivo de la séptima jornada del torneo Clausura-2011.

Los Tigres se auparon al liderato del campeonato la jornada anterior al llegar a 13 puntos mientras el Monterrey, que intenta recuperarse de un mal arranque, cuenta con nueve unidades.

Como es costumbre, las 33.000 localidades del estadio Tecnológico están agotadas y los jugadores de los dos equipos de la ciudad de Monterrey han entablado una intensa guerra de declaraciones.

Por ejemplo, el veterano Jesús Arellano, ídolo de los Rayados de Monterrey, aseguró que habrá juego brusco siempre que sea necesario para salir con el triunfo.

“Es el partido más importante de la ciudad y va a ser muy difícil, complicado, porque los dos equipos tienen buenos jugadores. Si tenemos que dar patadas, hay que tirar, pero tenemos que ganar. Este juego no se puede ni se debe perder”, dijo el ‘Cabrito’ Arellano.

Un atractivo especial del duelo es la presencia de dos delanteros chilenos de probada capacidad, uno en cada bando: Humberto Suazo, por los albiazules del Monterrey, y Héctor Mancilla, por los Tigres universitarios.

Por lo pronto, Suazo viene de destaparse con tres goles en la jornada anterior, lo que le puso al frente de la tabla de goleo con cinco tantos. A pesar de este antecedente, Mancilla, que ha marcado cuatro veces en el torneo, no se impresiona.

“Si hizo tres goles o no, a mí me tiene sin cuidado. No estoy preocupado por lo que hace Monterrey y mucho menos Humberto”, aseguró Mancilla.

Tan intensa es esta rivalidad que los jugadores foráneos la asimilan con rapidez y la mayoría se negaría a jugar con el otro bando.

Por ejemplo, el argentino José María Basanta, defensa del Monterrey, apunta que “en los dos años y medio que llevo acá ya le tomé un cariño muy especial a esta camiseta, a estos colores, y cada vez que enfrento a Tigres como que te dan más ganas de ganar”.

El también pampero Lucas Lobos, mediapunta de Tigres, garantizó que abandonaría el fútbol antes que pasarse a las filas del Monterrey.

“No podría jugar con ningún equipo que sea rival de donde estoy. Sería traicionarme a mí mismo, (antes) me quedaría sin jugar”, dijo Lobos.

Para esta edición del clásico norteño, la número 93 de la historia, los Rayados llegan con una racha de cinco partidos sin perderlo, la cual incluye tres triunfos y dos empates. Curiosamente, esa racha coincide con la presencia del paraguayo Osvaldo Martínez en el club regiomontano.

Por su parte, los felinos podrían tener en el brasileño Danilinho al talismán que les ayude a terminar con esa paternidad, ya que nunca ha perdido ante Monterrey en seis partidos disputados, de los cuales ganó cuatro y empató dos jugando para Jaguares.

El saldo histórico es de 33 victorias para Tigres por 32 de Monterrey y 26 empates, además de un partido que fue suspendido al minuto 7 sin resultado oficial.