El ejército egipcio anunció el viernes que garantizará las reformas democráticas prometidas por el régimen, entre ellas “elecciones libres y transparentes”, al tiempo que pidió que el país retorne a la normalidad y advirtió contra cualquier ataque a la seguridad del país.

En un comunicado leído por un presentador en la televisión pública y por un coronel del ejército frente a los manifestantes reunidos ante el Palacio Presidencial, el consejo supremo de las fuerzas armadas aseguró ser garante de las reformas prometidas por el presidente Hosni Mubarak, que la víspera decidió mantenerse en el cargo pese a una rebelión popular que exige su renuncia.

Mubarak anunció, provocando el rechazo de la calle, que delegaba poderes a su vicepresidente, Omar Suleimán, pero que permanecerá en el cargo hasta las elecciones presidenciales de septiembre, a las que ha prometido no presentarse.

El ejército aseguró asimismo que garantizará la organización de “elecciones libres y transparentes según las enmiendas constitucionales decididas” y advirtió “contra todo ataque a la seguridad de la nación y de los ciudadanos”.

El consejo también “subrayó la necesidad de un retorno al trabajo en los establecimientos del Estado y de un retorno a la vida normal”, en un esfuerzo por poner fin a una sublevación popular sin precedentes que desde hace 18 días exige el fin del régimen de Mubarak.

Coincidiendo con el feriado musulmán, este viernes, bautizado “Viernes de la Cólera” por los manifestantes, está convocada una nueva manifestación tras la oración del mediodía (07:00 horas locales), que se espera sea masiva y cuyo desenlace provoca temores de un nuevo brote de violencia.