La Cámara de Comercio de Santiago (CCS) estima que luego de conocer las cifras de actividad dadas a conocer este miércoles por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el Imacec de noviembre será del orden de 5,8%, lo que permitiría cerrar el último trimestre con un crecimiento de 5,5% y el año 2010 con un 5,2%.

La entidad precisó que la “relevancia de estas cifras es que se refieren a una economía en recuperación y no en crisis. Fue en el cuarto trimestre de 2009 que la economía chilena tuvo por primera vez una expansión de 2,1%”.

Según explicó la CCS, el perfil de crecimiento sectorial no muestra cambios sustantivos respecto de lo observado en meses anteriores, lo que significa que el motor que impulsa la economía continúa siendo el consumo y el comercio en general. Las ventas de bienes de consumo tuvieron un aumento de 16,8%, manteniendo -sorpresivamente- el fuerte vigor ya exhibido en octubre (16,6%).

“A estas alturas, el pulso que sigue el consumo ha excedido los pronósticos preliminares. Las ventas de bienes durables crecieron en 38% y las de los no durables, en 12%”, agrega la entidad.

La Cámara de Comercio de Santiago agregó que este ritmo es tan acelerado como el de mediados de año, en que el efecto del terremoto y del mundial de fútbol ejercían su influencia sobre el gasto de los hogares.

“Ahora dichos elementos no están presentes y posiblemente el descenso del tipo de cambio esté operando como un activador del consumo. De hecho, los precios implícitos de los bienes de consumo tuvieron una caída de 4,3% y sólo algunas categorías específicas, tales como combustibles, alimentos y artículos de librería, no siguen una tendencia declinante en los precios”, detalla.

La producción industrial tuvo un crecimiento de 2,5% en 12 meses, lo que a juicio de la CCS debe ser observada con cierto grado de benevolencia, ya que su base de comparación en 2009 está libre de los efectos de la crisis mundial.

“En todo caso, la muy gradual recuperación que presenta este actor está asentada en unos pocos rubros, tales como alimentos, fabricación de madera y de productos químicos. La incidencia positiva de los demás rubros es -definitivamente- menos relevante”, sostiene.

“En definitiva, estimamos que la economía chilena creció en torno a 5,8% en noviembre de 2010, con una estructura de impulsos que continúa fuertemente radicada en el gasto de los hogares y que se beneficia del descenso en precios presente en gran parte de la canasta de consumo”, concluye el informe.