La empresa Transelec solicitó la intervención de ambas policías para desterrar el robo de conductores eléctricos y reducir las bandas que se encuentran operando en las regiones de los valles.

Los sujetos se han establecido entre Rancagua y Chillán, altamente especialistas en estas prácticas, sustrayendo dichos elementos que posteriormente son reducidos.

Además de generarse problemas de funcionamiento en las empresas que forman parte del Sistema Interconectado Central, la mayor amenaza apunta a la propia comunidad, reconoció Luis Pérez, gerente zonal de la empresa.

El último hecho delictivo se produjo en Longaví, donde un individuo fue sorprendido por Carabineros, comercializando en un local de compra y venta de metales, conductores eléctricos robados desde el sistema.

Se le encontraron 40 kilos de este material, el que tuvo que ser rápidamente repuesto.

Transeléc hizo entrega al Gobierno Regional, un detallado informe relacionado con los lugares específicos donde las bandas están actuando, el modus operandi y los daños cuantificados que han sufrido.

Según el SEC, son 3 fases en las cuales estas bandas han fijado los actos delictivos, explicó el superintendente Francisco Valdebenito.

El personero aclaró que en la fase de transmisión, la falla por robo de conductores eléctricos puede ser de pocos minutos, pero al tratarse de alimentadoras de las empresas distribuidoras, se produce una tardanza en el restablecimiento del servicio básico.

Transeléc hizo un llamado al Gobierno para coordinarse con ambas policías, y establecer mecanismos que permitan identificar y detener a estos delincuentes, especialistas en un tipo de robo que les reporta suculentos dividendos al cerrar cada operación.