El mediático caso descubierto semanas atrás en Francia de un musulmán que tiene cuatro mujeres y 15 hijos y que en los últimos tres años recibió unos 175.000 euros de ayudas sociales, puso sobre el tapete la necesidad de actualizar la legislación para luchar contra la poligamia.

La justicia francesa acusó el miércoles de estafa, fraude a las prestaciones sociales y trabajo disimulado a Lies Hebbadj, un musulmán que tiene cuatro mujeres — con una de las cuales está casado legalmente y por quien obtuvo la ciudadanía francesa — y 15 hijos, más dos que están en camino.

El ministro francés del Interior, Brice Hortefeux, anunció el miércoles que tiene intenciones de “hacer evolucionar el derecho”, es decir actualizar la legislación para luchar contra “la poligamia de hecho” y “adaptarla” al código de la nacionalidad, es decir modificar la reglas para acceder a la ciudadanía francesa.

El caso de Lies Hebbadj salió a la luz en abril luego de que su esposa fuera multada por la policía por conducir vestida con un burka, velo islámico integral que cubre de la cabeza a los pies y tiene una apertura a la altura de los ojos.

Ya en ese momento, Hortefeux pidió que se le retire la nacionalidad francesa a Hebbadj por sospecha de poligamia y de fraude a las prestaciones sociales.

El miércoles, Hortefeux, que antes fue ministro de Inmigración, insistió en que “no es normal” que un extranjero que obtuvo la nacionalidad gracias a su casamiento con una francesa, conserve la ciudadanía si en los años siguientes vive “en una situación de poligamia abusando del sistema de prestación social”.

“Brice Hortefeux tiene razón de estar indignado”, sostuvo el actual ministro de Inmigración, Eric Besson, que consideró la situación de Hebbadj de “moral y políticamente inaceptable”.

Besson estimó que es posible “hacer evolucionar el derecho” para retirar la nacionalidad en caso de poligamia, aunque subrayó que es un asunto “jurídicamente delicado”.

Muestra de ello es que inmediatamente, el presidente del Partido de Izquierda, Jean Luc Melenchon, salió al cruce de esas declaraciones.

“Retirar la nacionalidad francesa fue el arma que usó el mariscal Pétain (ndlr: durante la ocupación nazi) para generar miedo entre quienes se hicieron franceses”, afirmó el eurodiputado.

“Si un francés comete un delito, va a la cárcel. No se le quita el documento de identidad”, se indignó Melenchon.

Hebbadj, dueño de una carnicería halal cerca de Nantes (oeste), está desde el miércoles bajo control judicial con la obligación de entregar su pasaporte, la prohibición de salir de Francia y la entrega de una fianza de 10.000 euros.

Según el fiscal de Nantes, Xavier Ronsin, las cuatro mujeres de Hebbadj -dos de ellas embarazadas- cobraron en los últimos tres años ayudas sociales por 175.000 euros, un dinero que también habría utilizado el inculpado.

Según estimaciones de 2006 de la Comisión Nacional Consultiva de Derechos Humanos (CNCDH), en Francia viven unas 20.000 familias polígamas, es decir unas 180.000 personas.

El fiscal indicó que la justicia citará a las cuatros compañeras de Hebbadj, entre éstas su esposa legal, que serán inculpadas de fraude a las ayudas sociales y en algunos casos de estafa.

El caso de Lies Hebbadj y la poligamia se produce en momentos en que el gobierno francés conservador impulsa una ley que prohíba el uso del velo islámico integral en los espacios públicos, inclusive en la calle.

Francia, que alberga a la mayor comunidad musulmana de Europa con unos seis millones de personas, podría adoptar en septiembre esa ley para prohibir el uso del burka o el niqab en las administraciones públicas, pero también en la calle, incluyendo tiendas, cines, restaurantes y mercados.