La oposición de izquierda reclamó el jueves explicaciones al presidente francés sobre las comisiones ilegales que favorecieron ventas de armas en los 90 y que habrían servido para financiar la campaña electoral de Edouard Balladur, apoyado por Nicolas Sarkozy, entonces ministro de Presupuesto.

Tres diputados socialistas pidieron explicaciones tras conocerse públicamente un informe de la policía de Luxemburgo que apuntala sospechas de comisiones ilegales que llegaron a Francia a través de la sociedad off-shore Heine creada en 1994 en el seno de la Dirección de Construcciones Navales (DCN) con el aval de Sarkozy.

Ese informe fue efectuado a pedido de dos jueces franceses que investigan un caso de presunto espionaje informático en la DCN.

Aunque no aporta la prueba, el informe dice que ese dinero sirvió para financiar la campaña del entonces primer ministro Edouard Balladur, candidato a la presidencia francesa en 1995 frente a Jacques Chirac.

“Es hora de aclarar todo esto. Los responsables (políticos) de entonces, es decir, Edouard Balladur y Nicolas Sarkozy (…) tienen que dar la información que esperan los franceses”, afirmó el número dos del Partido Socialista, Harlem Desir.

Según la policía luxemburguesa, “una parte de los fondos que pasaron por Luxemburgo fueron a Francia para financiar campañas políticas francesas”.

Al investigar el presunto espionaje en la DCN, la policía francesa encontró una nota que mencionaba la autorización para la creación de Heine del director de gabinete de Balladur, Nicolas Bazire, y de Sarkozy, que además era portavoz de campaña.

Por la sociedad Heine transitó hasta el año 2000 parte de las comisiones ilegales vinculadas a varios contratos de armamento, entre éstos la venta de submarinos “Agosta” a Pakistán en 1994, que la justicia francesa investiga en relación con un atentado perpetrado el 8 de mayo de mayo de 2002 en Karachi que causó 14 muertos, once de los cuales eran empleados de la DCN.

Según informes aportados a la instrucción, las comisiones pagadas a Pakistán para obtener el contrato “Agosta” podrían haber dado lugar a otras comisiones ilegales que volvieron a Francia para financiar la actividad política de Balladur.

Según el diario Liberation (izquierda) la campaña de Balladur recibió 1,5 millones de euros (dos millones de dólares) de esas comisiones ilegales.

El diputado socialista Manuel Valls consideró que debe constituirse una “verdadera comisión de investigación”.

“El gobierno está haciendo todo para obstaculizar la verdad”, sostuvo el diputado socialista Bernard Cazeneuve, presidente de la comisión parlamentaria sobre el atentado de Karachi.

La dirigente de extrema derecha, Marine Le Pen, sostuvo que Sarkozy “debe por supuesto renunciar si hay pruebas” de su implicación en el caso.

Pero el portavoz del gobierno, Luc Chatel, denunció una “fábula” y sostuvo que el “presidente de la República es totalmente ajeno a este caso”.

Los familiares de seis de las víctimas del atentado, no lo ven así y consideran que el informe luxemburgués “muestra que Nicolas Sarkozy está en el centro de la corrupción y que mintió a las familiares”.

“No estamos ante una fábula, sino ante una mentira de Estado”, sostuvo su abogado, Olivier Morice.