El jugador francés Thierry Henry, que con una mano que el árbitro no vio logró el gol que clasificó a Francia para el Mundial-2010 y eliminó a Irlanda, aseguró este viernes en un comunicado que “la solución más justa” sería volver a disputar el encuentro.

Imagen: Bryan Clayton en Flickr

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“Está claro que la solución más evidente sería volver a jugar el partido, pero esto no depende de mí”, dice un texto hecho público en Gran Bretaña. “Naturalmente estoy incómodo con la manera en qué ganamos y lo siento muchísimo por los irlandeses, que merecían ir a Sudáfrica”, añade el jugador.

El comunicado de Henry fue hecho público después que este viernes la FIFA confirmara que el partido no se podrá volver a jugar, de acuerdo con el reglamento.

Es importante recordar que Francia clasificó al Mundial luego de derrotar a Irlanda en el partido de ida por la cuenta mínima y perder el de vuelta por el mismo marcador, por lo que se debió recurrir al tiempo de suplemento, donde el delantero francés habilitó con una evidente mano a Gallas para que decretara el tanto que hundió las aspiraciones irlandesas de clasificar a Sudáfrica.

Luego de la polémica, se generó toda una campaña contra el delantero por su falta de honestidad, por lo mismo, Henry, decidió dar las citadas declaraciones, como forma de limpiar su decaída fama.