Buscando que la descentralización permita que no todas la decisiones en la gestión de los talentos, y los proyectos a gran escala se desarrollen fuera de la región, es que se llevó a cabo, y por segundo año consecutivo, las Charlas TEDx Plaza Sotomayor, en el Parque Cultural de Valparaíso.

Esta idea, está apoyada por Fundación Para El Progreso (FPP), el Ideas Factory (IF) de la Universidad Santa María, y la Fundación Piensa, entre otras, que prestan el apoyo logístico y de difusión, como Hiway, CORFO, Cabify y CCT Valparaíso (Centro Tecnológico).

Con un lleno total, su anfiteatro, recibió a estudiantes de diversas áreas, e invitados, que se interesaron en participar de las exposiciones de física, literaria, informática, biotecnología, y en derecho, ofrecidas por Claudio Dib, Roberto Ampuero, Carol Huillín, Guillermo Pérez y Carolina Águila.

Para uno de sus tres directores, Gonzalo García Cañete, las espectactivas de este evento, son lograr la consolidación como uno de los escenarios más importantes para mostrar los talentos de la región de Valparaíso, y sumar más instituciones.

Asimismo, y debido al gran éxito de la versión 2016 de las Charlas TEDx, realizada en el tradicional Edificio Cousiño, del DOUC UC, es que se duplicó la cantidad de inscritos, por lo que, para Mauricio Cifuentes, director del IF Valparaíso, el elegir bien los contenidos de los ciclos de charlas, permiten apostar por eventos de mayor nivel. A su juicio, el objetivo, es disponer los elementos para que los talentos innovadores, se valoricen.

El evento, que se inició con una reunión en el patio del recinto, tuvo como número musical de apertura, la presentación de la Camerata MusArt de Casablanca, que interpretó piezas que crearon un clima de atracción, para lo que fueron las exposiciones de cada uno de los invitados, de duración de 18 minutos, cada una, como lo estableció el programa de la organización.

La idea de que “Vale la pena difundir”, desde cada una de las áreas del desarrollo, vio, una vez más, en Valparaíso, una amplia respuesta de la fuerza de la comunidad de estudiantes y de la empresa y la investigación científica, haciendo notar que es necesario buscar la fórmula de la ideantidad local de la comunidad porteña, cambiando la realidad que posterga a los valores humanos que nacen y se desarrollan en sus casas de estudios.