La hija de un esforzado comerciante de la población Libertad de Talcahuano sostuvo que por temor a represalias de los asesinos de su padre, dejará el sector.

Para Irma Araneda, la irreparable pérdida de su padre, Luis Eduardo Araneda Martínez (58), marcó su vida.

El hombre vivía en calle Isla Mocha con pasaje San Félix y la noche del 28 de marzo del año pasado, dos delincuentes entraron al domicilio donde tenía el negocio “El Lalo”, exigiendo dinero. Creían que tal vez el comerciante disponía de mucho efectivo.

Lo mataron de dos balazos, por lo cual el Tribunal de Juicio Oral de Concepción ya los condenó por robo con homicidio, fijando la lectura de sentencia para el sábado próximo.

El fiscal Mario Elgueta solicita 15 años de cárcel, mientras el abogado César Ramírez, de la familia del occiso, exige presidio perpetuo simple.

Irma Araneda espera el máximo rigor para los asesinos de su padre:

Además de la dolorosa pérdida, Irma lamenta que el barrio en que nació siga estigmatizado por unos pocos. De hecho, ella asumió el negocio del papá, pero se irá por temor a represalias, aunque sin dejar de querer al lugar.

Gracias al esfuerzo de su padre, Irma cursó estudios superiores titulándose de Ingeniera Comercial, en la Universidad de Concepción.

Los imputados son Óscar Fabián Arriagada Alarcón, un chileno-argentino vecino del comerciante asesinado, quien estuvo acompañado por Juan Segundo Bastías Contreras. Ambos tienen 31 años y un extenso prontuario policial.