El “sexting”, anglicismo utilizado para referirse al envío de contenidos sexuales a través de teléfonos móviles, es una práctica de la era de la conectividad efectuada con frecuencia por los jóvenes y, cada vez más, por los estudiantes secundarios.

En este contexto, y para conocer el impacto de este nuevo hábito en los alumnos, un reciente estudio de la Universidad de Utah (EEUU) se propuso reflejar su realidad por medio de reveladores datos.

El trabajo, publicado en la revista Archives of Sexual Behavior y aplicado a 600 estudiantes entre los 14 y 18 años, determinó que el 20% de los alumnos “sextea” con mayor frecuencia de lo pensado.

A continuación, te dejamos con 5 impactantes datos revelados por la investigación, los cuales evidencian cómo se vive esta práctica actualmente en dicho país y, posiblemente, en otros lugares del mundo.

1.- Casi 2 de cada 10 estudiantes (18% de los hombres y 17% de las mujeres) confiesa haber enviado una imagen sexual explícita por medio de su celular.

2.- Un 50% de los estudiantes hombres reportó haber recibido un ‘sext’ en sus teléfonos móviles, contra un 31% de las mujeres. De acuerdo a Yahoo!, esto podría significar que las chicas son más proclives a enviar este tipo de mensajes.

3.- Aproximadamente, el 25% de los estudiantes que recibieron una fotografía sexualmente explícita en sus celulares se la reenviaron a terceros.

4.- Un 33% de los estudiantes secundarios que enviaron una foto de estas características, sabían que podrían enfrentar consecuencias legales si eran atrapados. “Este hallazgo es particularmente preocupante”, indicaron desde Yahoo!, añadiendo que si bien las leyes sobre el ‘sexting’ varían entre estado y estado, “quienes mandan o reciben fotos de desnudos de alguien menor de 18 años, eventualmente pueden enfrentar cargos por poseer o distribuir pornografía infantil”.

5.- Las imágenes de tipo sexual enviadas, no necesariamente eran de la persona que las mandaba.

Finalmente, según indicó la especialista familiar Barbara Greenberg, “debemos continuar educando a nuestros hijos y hacerles saber que no hay remedios rápidos, como medicaciones anti-virales, para aquellos mensajes (de ‘sexting’) que se difunden como reguero de pólvora”.

“Una vez que los mensajes se envían, están permanentemente en las manos y en las pantallas de los otros (…) Enviar fotos puede parecer entretenido en el momento, pero las consecuencias pueden ser horribles”, agregó la experta.