En la mayoría de los países el proceso de vacunación avanza favorablemente, aunque aún existen personas que no creen en la pandemia ni en la efectividad de la vacuna.

Ante esto, han sido varios miembros del personal de salud que se han manifestado en contra de los movimientos antivacunas, mostrando la cruda realidad de aquellos pacientes que se agravaron o fallecieron luego de infectarse de coronavirus.

Una de ellas es la doctora Brytney Cobia, quien trabaja en el Centro Médico Grandview en Birmingham, Alabama (Estados Unidos), que usó sus redes sociales para contar su experiencia y los riesgos que el virus ha significado para la población mundial.

En una publicación a través de su cuenta de Facebook, la profesional contó que ha estado tratado a muchos pacientes jóvenes, que decidieron no vacunarse por no creer en el virus y ahora están graves en el hospital.

“He hecho muchos progresos animando a la gente a vacunarse últimamente. ¿Quieres saber cómo? Estoy ingresando en el hospital a jóvenes sanos con infecciones muy graves por COVID. Una de las últimas cosas que hacen antes de ser intubados es suplicarme por la vacuna“, comenzó escribiendo.

“Les tomo la mano y les digo que lo siento, pero que es demasiado tarde. Unos días después, cuando llamo para avisar sobre la muerte, abrazo a los miembros de su familia y les digo que la mejor manera de honrar a su ser querido es vacunarse y animar a todos los que conocen a hacer lo mismo. Ellos lloran. Y me dicen que no lo sabían. Pensaron que era un engaño. Pensaron que era político”, agregó.

“Pensaron que debido a que tenían cierto tipo de sangre o cierto color de piel, no se enfermarían tanto. Pensaron que era ‘solo la gripe’. Pero estaban equivocados. Y desearían poder regresar. Pero no pueden”, sostuvo la especialista.

Además, en la publicación relató cómo los pacientes le agradecen una vez que se inoculan, para luego ella realizar los informes de defunción de aquellos que fallecieron.

Anteriormente, la médica contó su experiencia cuando tuvo un leve caso de coronavirus mientras estaba embarazada. “El miedo que sentí por mí y por mi bebé aún no nacido era suficientemente malo, pero la culpa que sentí por exponer a personas que confiaron en mí es en lo que quiero enfocarme”, dijo en un posteo a través de su cuenta de Facebook.

Desde entonces, constantemente realiza campañas de vacunación e incita a las personas a inocularse, no solamente por ellos, sino también por los riesgos que pueden generar a su entorno y familia.