Y la experiencia nos dice que, cuando las reglas se ajustan a la medida de las empresas mediante este tipo de lobby, los trabajadores somos la primera variable de ajuste.

Como Federación Nacional de Sindicatos de Casinos y Hoteles (Fenasicajh), advertimos una amenaza real al principio de continuidad laboral ante el nuevo proceso de licitación del casino de Viña del Mar.

Nos preocupa profundamente la validación pública de opiniones sesgadas que ponen en riesgo la estabilidad del sector. Nos referimos a los recientes dichos del exsuperintendente Francisco Leiva Vega, quien califica la oferta económica actual como “destinada al fracaso”.

Es imperativo aclarar que esta no es una opinión técnica neutral; proviene del actual Gerente Corporativo de una de las empresas con interés directo en la licitación.

El peligro de estas intervenciones es evidente: se busca instalar una narrativa de crisis para flexibilizar las condiciones de la licitación a favor de los operadores.

Y la experiencia nos dice que, cuando las reglas se ajustan a la medida de las empresas mediante este tipo de lobby, los trabajadores somos la primera variable de ajuste.

La prueba de esta desprotección es tangible. La reciente noticia de la puesta en venta del edificio del Gran Hotel Pucón (tras la reorganización de Enjoy) ha priorizado el resguardo de activos inmobiliarios, dejando a cientos de trabajadores en la incertidumbre absoluta.

Si las autoridades permiten que se pautee el proceso desde fuera, este escenario de desamparo se repetirá en Viña del Mar y todos los futuros procesos.

Hacemos un llamado urgente a la Superintendencia de Casinos de Juego y al Ministerio del Trabajo. No pueden permitir que el futuro de cientos de familias dependa de un juego de influencias donde, al parecer, algunos ya tienen las cartas marcadas.

Fenasicajh
Federación Nacional de Sindicatos de Casinos y Hoteles

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