Pese a los estragos causados por la invasión rusa a Ucrania, el centro de adiestramiento ha seguido con la crianza y entrenamiento de sus perros, los cuales en su vida adulta desempeñarán labores militares y en la policía.

Desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania, la vida de millones de personas ha cambiado drásticamente. La mayoría de los civiles optó por migrar y otros permanecen en el territorio para enfrentar a los soldados extranjeros.

Bajo este contexto, se dio a conocer la historia de un pequeño centro de adiestramiento canino llamado K9 Elizarova, ubicado en ciudad costera de Odessa. Inna Elizarova (44 años) y Maksim Cherkashin (de 20) dirigen el lugar, donde crían y trabajan en la formación de sus perros.

En el centro canino se encargan de adiestrar a canes de distintas razas y que provienen de diferentes partes del mundo, para que en su vida adulta realicen diversas funciones y responsabilidades, principalmente enfocadas en tareas militares y policiales.

Pese a los estragos que ha provocado la irrupción de las fuerzas rusas en el territorio ucraniano, sus dueños se niegan a cerrar y han decidido continuar con su labor.

“Nuestros perros, en todo el mundo, hacen bien su trabajo en beneficio de la humanidad. Además de la cría, preparamos a los perros para una vida seria y adulta. Los principales clientes son el ejército y la policía. Maksim es uno de los mejores entrenadores de perros del mundo y un tipo con mucho talento”, comentó Inna Elizarova.