Existe consenso científico en que parte importante del clima de Chile, la productividad de sus mares, las reservas de agua dulce de los glaciares, entre otros fenómenos, se encuentran determinados por la influencia de la Antártica.

Gracias a esta vinculación geográfica y climática, como también por su conexión histórica, jurídica, diplomática, logística y científica, la Antártica se ha posicionado como un polo de desarrollo para el país.

La Política Antártica Nacional publicada en octubre del año pasado, establece como uno de sus objetivos “Fortalecer la conciencia e identidad antártica nacional, proteger y difundir el patrimonio histórico, científico y cultural antártico de Chile”. En línea con este propósito, se busca promover en los planes de estudio nacionales la incorporación de la historia, geografía, derechos soberanos, importancia de la ciencia antártica y el desarrollo de conocimiento y el papel de Chile en el Tratado Antártico, para fortalecer la identidad polar del país y su rol internacional.

Punta Arenas y la educación antártica

En este sentido, el Instituto Antártico Chileno (INACH) ha asumido el desafío de promover el conocimiento y la relevancia de la Antártica en la sociedad chilena y, especialmente, desde la ciudad de Punta Arenas, puerta de entrada al Continente Blanco, la que históricamente ha estado conectada con Antártica por su posición geográfica, ubicación estratégica y por la logística que entrega a programas antárticos de diferentes países que pasan por este territorio.

Es una puerta que también se abre a la educación antártica, “antartizando” desde Punta Arenas a niños, niñas y jóvenes, las próximas generaciones que serán las responsables de su protección y conservación.

Por este motivo, durante más de 20 años el INACH ha organizado el encuentro de la Feria Antártica Escolar (FAE), programa desarrollado con aportes del Fondo de Innovación, Ciencia y Tecnología, del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación.

La FAE ha llevado a miles de estudiantes de enseñanza media del país a hacerse preguntas sobre la Antártica y crear propuestas basadas en la ciencia con la ayuda de sus profesoras y profesores. Durante la FAE, los equipos seleccionados participan y trabajan estrechamente para que sus propuestas sean una de las 3 ganadoras del certamen, poder ser parte de la Expedición Antártica Escolar y experimentar un viaje al Continente Blanco.

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Un compromiso país por integrar la Antártica al currículum

Entre otras iniciativas educativas complementarias, la capacitación para educadores de la primera infancia, desde el año 2009, ha aportado a la formación de educadores en temáticas antárticas, abordando temas como glaciología, conexión Sudamérica-Antártica, biodiversidad, entre otros. Los talleres teóricos-prácticos “Investigadores Polares por un día”, surgieron el año 2014 para estimular el conocimiento de la ciencia antártica en estudiantes de enseñanza básica, para que puedan dar sus primeros pasos en la investigación del Continente Blanco.

Esta iniciativa lleva más de diez años impartiendo talleres en temáticas antárticas a la comunidad escolar, llevando este conocimiento a alrededor de 4.000 niños y niñas a nivel nacional, convirtiéndose en una iniciativa estratégica para fomentar el desarrollo de competencias en investigación e innovación escolar.

En la reciente reunión del Consejo de Política Antártica (CPA), una instancia interministerial presidida en esta ocasión por el Presidente de la República Gabriel Boric, se acordó establecer una instancia de trabajo conjunto entre el INACH y el Ministerio de Educación para buscar la mejor forma de incluir a la Antártica en el currículum escolar.

La integración de este tipo de temáticas en el ámbito escolar potencian las habilidades de investigación y pensamiento crítico en jóvenes, y fortalecen su sentido de identidad y responsabilidad ambiental. Educar sobre la Antártica es clave para comprender las crisis climáticas que están afectando a nuestro planeta y cómo podemos generar acciones ante ellas, a través de la formación de ciudadanas y ciudadanos comprometidos.

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