Un estudio del Automóvil Club de Chile revelado este lunes dio a conocer las principales características de los repartidores que trabajan en las calles de la capital: 38% no tiene licencia de conducir, un 74% dijo realizar conductas temerarias y un 81% dice no tener seguro de salud. Según el organismo, hay "analfabetismo vial" entre los repartidores.

Una encuesta realizada por el Automóvil Club de Chile en el Gran Santiago arrojó que un 38% de los repartidores de delivery trabaja sin licencia de conducir.

El estudio se realizó para conocer el comportamiento vial y las condiciones laborales de los motoristas, actividad que sufrió un boom ante el inicio de la pandemia debido al cierre de restaurantes y el aumento del reparto de comida.

Por ejemplo, un 74% de los encuestados reconoció realizar conductas temerarias para llegar a tiempo con las entregas y un 47% dijo circular a exceso de velocidad. En tanto, un 28% dice conducir con sensación de estrés.

A nivel de perfil, 82% de los repartidores son hombres; y un 48% de los encuestados totales es extranjero, liderados por los venezolanos (77%) seguidos de los colombianos (10%), peruanos (5,9%) y ecuatorianos (4,1%).

En tanto, se reportó que un 60% de quienes transitan sin licencia de conducir son extranjeros y 40% chilenos.

Junto con ello, un 74% reconoció tener conflictos en las calles con los conductores del transporte público, el 68% con los automovilistas, el 45% con los peatones y el 12% con los ciclistas; y un 55% dijo que la agresividad e imprudencia de los demás influyen en su errático comportamiento vial.

El gerente de Movilidad de Automóvil Club de Chile, Alberto Escobar, señaló mediante un comunicado de prensa que entre los repartidores hay un “acatamiento voluntario a las normas del tránsito”.

“Hay una suerte de analfabetismo vial que les impide conocer cuáles son sus deberes y obligaciones en el sistema vial. La premura y la presión por despachos más expeditos los están llevando a circular de manera imprudente en la vía pública, lo que no está favoreciendo en nada a la seguridad vial. En el último año, en más de un 20% han aumentado los siniestros viales de motociclistas y ciclistas que se dedican a estos servicios a nivel nacional”, señaló.

Precarias condiciones labores

El sondeo también arrojó que un trabajador de delivery trabaja más de ocho horas al día en promedio, con más de 14 viajes al día, predominando el uso de moto (53,5%) por sobre el automóvil (24,1%) o la bicicleta (22,4%).

Sobre esto último, el 30% dice que el exceso de horas de trabajo influye en los errores que comete y un 17% del total dijo haber sufrido accidentes o robos desde que se inició la pandemia.

A esto se suma que un 81% no cuenta con seguros de salud, el 67% no posee seguros contra accidentes, el 68% de los repartidores aseguró que la empresa en donde presta el servicio de despacho no le brinda acceso a baño y el 80% dijo no contar con espacios habilitados para almorzar.

Ante estos datos, Escobar señaló que “debe existir un equilibrio entre una economía dinámica que potencie el empleo pero que no se deje de lado la seguridad de las personas. La ausencia de la figura del empleador dentro esta industria es una realidad y se les deja a los repartidores prácticamente toda la responsabilidad en lo que se refiere a riesgos”.

“Se debe trabajar con urgencia en un marco regulatorio mucho más estricto, que permita ofrecer mejores condiciones de trabajo y que garantice que estos conductores cumplan con las medidas de seguridad que se necesitan para sus traslados”, agregó.

Otros resultados del sondeo fueron que el 55% considera que las bajas condiciones laborales influyen dentro de las situaciones de peligro que viven y que el 48% reconoció no haber recibido ningún tipo de inducción por parte de las aplicaciones o de los comercios para moverse de forma segura.