Junto con confirmar la responsabilidad de la investigación, la DGAC informó que "en estos momentos, se encuentra viajando un equipo de investigadores del área de Operaciones y Aeronavegabilidad" de la institución con destino a Auckland, Nueva Zelanda.

La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) anunció que serán los responsables de la investigación del incidente que protagonizó este lunes un avión Boeing 787 Dreamliner de la aerolínea chilena Latam, en un vuelo entre Australia (Sídney) y Nueva Zelanda (Auckland), pero que tenía como destino final, Chile.

Se trató de una fuerte turbulencia que afectó al vuelo que llevaba 263 pasajeros y nueve tripulantes, causado preliminarmente por un fallo técnico en la aeronave y que dejó a cerca de 50 pasajeros lesionados.

Posteriormente se detalló que 10 pasajeros de las nacionalidades de Brasil (2), Francia (1), Australia (4), Chile (1) y Nueva Zelanda (2) además de 3 tripulantes de cabina fueron derivados a un centro médico para confirmar su estado de salud.

A poco más de 24 horas del accidente del Boing 787 de Latam, la DGAC rectificó lo determinado inicialmente, cuando DGAC informó que el incidente sería “investigado por la Comisión de Investigación de Accidentes de Nueva Zelanda (TAIC)” y aseguró que será la institución nacional que indague lo acontecido.

“Dado que el estado de matrícula de la aeronave involucrada es chilena, se ha coordinado con la TAIC que la respectiva investigación la realizará la autoridad aeronáutica de Chile”, aseguró la tarde de este martes la DGAC a través de un comunicado.

Decisión que se toma de acuerdo a lo definido en el anexo 13, capítulo 5 de la Organización de Aviación Civil Internacional.

Junto con confirmar la responsabilidad de la investigación, la DGAC informó que “en estos momentos, se encuentra viajando un equipo de investigadores del área de Operaciones y Aeronavegabilidad” de la institución con destino a Auckland, Nueva Zelanda.

Información que se conoce luego de que investigadores de accidentes en Nueva Zelanda indicaron que comenzaron a recoger evidencia, “incluyendo la incautación de las grabadoras de voz y datos de vuelo de la cabina”.

Sin embargo, un portavoz aclaró que “la investigación corresponde a Chile”.

Los problemas de Boeing

La seguridad de los aparatos Boeing está bajo la mira después de una serie de incidentes recientes.

Sus aviones 737 MAX fueron inmovilizados durante casi dos años por dos accidentes en vuelos de la indonesia Lion Air y de la etíope Ethiopian Airlines en 2018 y 2019.

“Estamos trabajando para recoger más información del vuelo y suministrar cualquier apoyo necesario”, dijo la empresa en un comunicado.

Posteriormente agregó que “Boeing está listo para apoyar actividades relacionadas con la investigación conforme se le solicite”.

En enero, en un avión de Boeing 737 MAX de Alaska Airlines, una puerta se desprendió poco después del despegue provocando varios heridos leves.

La semana pasada, un Boeing 777 dirigido a Japón tuvo que aterrizar de emergencia tras el despegue en San Francisco por el desprendimiento de una rueda.

Los reguladores estadounidenses dieron este mes a la empresa 90 días para solucionar sus problemas en el control de calidad y la instaron a comprometerse en “mejoras profundas y reales”.