Rusia anunció este martes haber probado con éxito su nuevo sistema de defensa antiaérea S-500, misiles de último modelo desarrollados estos últimos años en medio de tensiones con Occidente.

“El nuevo sistema S-500 efectuó ejercicios de tiro sobre un objetivo balístico a gran velocidad”, indicó en un comunicado el ministerio ruso de Defensa.

“El objetivo fue alcanzado”, añadió el comunicado del ejército ruso, que difundió por primera vez imágenes del S-500 en acción.

Según esta fuente, el S-500 se desplegará en una unidad de la región de Moscú cuando se hayan terminado todos los ensayos en curso.

Rusia afirma que los S-500, con un alcance máximo de 600 kilómetros, “no tienen equivalente en el mundo”.

En concreto, estos vienen a sustituir a los sistemas S-400, que siguen siendo muy avanzados tecnológicamente, y que Rusia vendió recientemente a países como Turquía, lo que provocó protestas de la OTAN y de Estados Unidos.

A principios de julio, el comandante de las fuerzas aeroespaciales rusas, Serguéi Surovikin, explicó que los S-500 podrían “destruir misiles de alcance medio y, si es necesario, misiles intercontinentales en la última parte de su trayectoria”.

Los S-500 “pueden también destruir misiles hipersónicos”, precisó Surovikin en “Krasnaya Zvezda”, el periódico del ejército ruso.

Con el trasfondo de las tensiones con los países occidentales, Rusia multiplicó el desarrollo de nuevas armas estos últimos años.

El lunes anunció el exitoso ensayo del misil hipersónico Zircon, que forma parte de la gama de armas “invencibles” de las que se vanagloria el presidente Vladimir Putin.

Putin tenía previsto visitar el martes el salón aeronáutico MASK-2021, cerca de Moscú, en el que se dará a conocer un nuevo caza ruso.