Más de la mitad de los escoceses apoya ahora la independencia de su región, tras la decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europea, según un sondeo publicado este domingo.

El sondeo de Panelbase para el Sunday Times indica que el 52% de los encuestados quiere romper con el resto del Reino Unido, frente a un 48% que se opone a la secesión.

Escocia rechazó la independencia en el referendo de septiembre de 2014. Pero la primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon, dijo tras el Brexit que una segunda consulta era ahora “altamente probable“, para que la región no se quede fuera de la UE contra su voluntad.

En el histórico referendo del jueves, el conjunto de los británicos votó en un 52% a favor de abandonar la UE. En Escocia, en cambio, la opción más votada fue la permanencia, con un 62%.

Tras dirigir una reunión de emergencia de su gobierno autónomo este sábado, Sturgeon dijo a la prensa que “un segundo referéndum de independencia es claramente una opción que necesita estar sobre la mesa, y que está realmente sobre la mesa”.

“Para asegurarnos de que tal opción es realizable (…), se tomarán pasos para garantizar que existe la legislación necesaria”, agregó.

La encuesta de Panelbase, que entrevistó a 620 adultos el viernes y el sábado, indica que el 52% estima probable que Escocia sea independiente en un plazo de cinco a diez años.

En abril, sólo el 30% creía en esa posibilidad, según una encuesta efectuada entonces.