Ortega llama nazi a Volodimir Zelenski y critica cumbre de Celac-UE por insistir en condena a Rusia

El líder de Nicaragua, Daniel Ortega, criticó a la Unión Europea (UE) por haber insistido en la participación de Volodimir Zelenski en la cumbre con la Celac, además de tratarlo de “nazi”.

Durante un discurso en el que expresó sus más duras críticas en contra del presidente europeo.

“En esta reunión de la Unión Europea con la CELAC querían incluir al fascista, al presidente nazi de Ucrania”, criticó Ortega.

Lo anterior, durante un discurso dado este miércoles para conmemorar los 44 años de la revolución sandinista.

Ortega también criticó a la UE por intentar “meter cizaña en la Celac” con sus constantes presiones para firmar una declaración conjunta de condena a Rusia.

Todo esto, por la invasión de Ucrania, así como por su rechazo a que Nicaragua participase en dicha cumbre.

“Los europeos se empeñaron en tratar de introducir unos párrafos donde culpaban a Rusia de todo lo que acontecía en Ucrania. No podíamos aceptar esto. No tenía sentido en la agenda meter esos temas”, dijo según dijo el medio ‘Confidencial’.

Ortega dice que Zelenski es un nazi y críticas a la CIJ

Por otro lado, también se refirió a la reciente sentencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).

Recordemos que la CIJ favoreció a Colombia en relación a la propuesta nicaragüense de extender su plataforma marítima sobre territorio colombiano.

Lo anterior, más allá de las 200 millas náuticas, recordando a Bogotá que debe cumplir otro fallo de 2012 en favor de Managua.

“Busquemos la forma de plasmar esto en un decreto, acuerdo, donde queda claro que Nicaragua ya es dueña y está ejerciendo en esos 75.000 kilómetros cuadrados que le dio la Corte a Nicaragua en el mar Caribe. Con el mejor espíritu de paz, le hago llegar este mensaje al presidente (Gustavo) Petro”, ha dicho.

Ortega se refiere a un fallo de 2012 por el cual la CIJ reconoció la soberanía de Colombia sobre el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.

Al mismo tiempo amplió la extensión de las aguas territoriales de Nicaragua hasta 200 millas náuticas en todos los puntos de la frontera en el Caribe.

Colombia se negó a acatar la sentencia e incluso denunció el Pacto de Bogotá y, en respuesta, Nicaragua volvió a demandar a su vecino por impedirle disfrutar de sus nuevos derechos en esas aguas y para extender su plataforma continental.