Francisco dejó su silencio habitual para protagonizar uno de los capítulos más intensos de lo que va de "Gran Hermano": fue nominado por la producción del programa.
Francisco, uno de los inquilinos menos bulliciosos de “Gran Hermano”, fue uno de los protagonistas del capítulo de este jueves en el reality de Chilevisión, donde protagonizó una comentada pelea con Jennifer (“La Pincoya”).
Los problemas comenzaron cuando el hombre de 61 años comenzó a hablar en malos términos de Francisca. “¿Sabes por qué no pasa desapercibida? Si me preguntai a mí, es porque la encuentro ordinaria… Le dije a ella: teni ojos lindos y todo, pero abrís la boca…. Y dejai la cagada. ‘Si, en realidad me pasé de revoluciones’, me dijo ella”, rememoró en diálogo con la chilota, quien señaló que no estaba acostumbrada a convivir “con minas tan lindas”.
“Yo sí estoy acostumbrado, esa es la diferencia contigo”, respondió tosco Francisco.
En otro diálogo, ya en la cocina, el residente de Maipú criticó el uso de tatuajes de sus compañeras. ¿Por qué tantos dibujos que se hacen estas cabras? ¿Tantos tatuajes, digo yo?… ¿Es una moda rayarse el cuerpo?”, se preguntó mientras Jennifer explicaba que se trataba de una “moda”.
A continuación, “La Pincoya” confesó que se había hecho dos piercing por motivos laborales. Tras esto, el comentario de Francisco fue el siguiente: “Es como los chanchos para que no se pierdan, para que no anden escarbado en las plantas”.
“Eres chapado a la antigua. Lo que tú dices no más está bien”, reaccionó Jennifer. “En los tatuajes doy mi opinión, pero cada loco con su tema”, respondió él.
El momento que quebró la armonía ocurrió mientras se realizaba una prueba y ambos debían permanecer juntos. “Tengo sueño, pos… Ya, ya, ya”, gritó para que Jennifer lo dejara dormir y no contara sus “historias”. “Había una vez una pareja de amigos que no eran tan amigos…”, comenzó a bromear. “¡Un alicate para soltarle los cables a esta vieja, para que se quede callada un rato!”, respondió Francisco.
“Oye, la gente me está viendo… Sabís qué, chao no más. Cagaste conmigo”, le respondió enfática. “Típico hueón machista, mala clase… Terminó el hueveo, ahora estamos en guerra con él”, añadió después, ya lejos de Francisco.
Para coronar su capítulo, y a modo de reprimenda, “Gran Hermano” decidió sancionar a Francisco con una nominación a la placa tras infringir una de las normas del programa.
¿El motivo? En el marco de una jugarreta colectiva, el hombre de la pañoleta negra empujó a un grupo de sus compañeras hacia la piscina, causando que Estefanía cayera con micrófono. Este detalle (“No deben quitarse el micrófono por ningún motivo”, fue la orden del programa), fue el gatillante de la decisión.
