La familia real de Noruega enfrenta una de las polémicas más importantes de la historia de las monarquías y es gracias a un miembro de la realeza que no nació en cuna de oro. Se trata de Marius Borg, hijo de la princesa Mette-Marit, quien nació antes de conocer a Haakon Magnus, heredero de la corona.
El hombre de 28 años ha sido acusado en múltiples ocasiones -más precisamente 23- por diversos delitos, desde amenazas hasta violación.
Marius Borg, nacido de Mette Marit y Morten Borg, fue detenido por primera vez en agosto del año pasado, cuando protagonizó un episodio de violencia doméstica en el departamento que compartía con su pareja de entonces en Oslo, según consigna ABC.
Sin embargo, esa no ha sido la única vez que tuvo problemas con la justicia, pues desde esa fecha ha sido arrestado en tres ocasiones más, aunque en ninguna de esas oportunidades ha enfrentado medidas cautelares de ningún tipo.
De acuerdo al mencionado medio, entre 15 y 20 mujeres han denunciado a Marius Borg por delitos como agresión sexual, amenazas y/o violencia física.
Así las cosas, las 23 denuncias en su contra corresponden a un cargo por violación con coito, dos por violación sin coito, cuatro por conducta sexual ofensiva, una por abuso en relaciones cercanas, dos por lesiones corporales, una por daños, amenazas, cinco por vulnerar una orden de alejamiento, abuso sexual a una agente de policía y cinco infracciones de tránsito.
El hijo de Mette Marit ha sido firme al negar los más graves. Aunque en los 14 interrogatorios a los que se ha sometido, ha reconocido algunos episodios de violencia y amenazas.
Así mismo, el plebeyo de la realeza noruega no ha mostrado un ápice de arrepentimiento, lo que ha dañado sustancialmente la imagen de la familia noble.
Con el juicio que decidirá su culpabilidad a la vuelta de la esquina, Marius Borg, fue captado por la revista noruega Se og Hør junto a su nueva pareja, Andrea Shaw, quien es hija de un amigo de su padre biológico, según consigna El País.
Este último, Morten Borg, también tiene un pasado criminal. En los 90’s fue condenado a dos años de prisión por posesión de cocaína (50 gramos), además de otros delitos como violencia y conducción en estado de ebriedad.
Aunque su madre se ha mantenido intachable en el trayecto hacia el trono, los problemas de Marius Borg han terminado por manchar y afectar a la familia real de Noruega, quienes en todo momento le han prestado su apoyo al hombre.