Mañana miércoles vence la vigencia de la Ley de Protección del Empleo, que desde abril de 2020 permitió introducir la figura de la “suspensión de contrato”, con la cual empleadores mantenían el vínculo contractual con sus trabajadores, quienes recibían ingresos con cargo al Seguro de Cesantía y donde actualmente 65 mil personas siguen en esa condición.

La última extensión por parte del Gobierno fue hace justo un mes atrás, pero no se ha informado una nueva.

Analistas señalan que esta norma fue una de las medidas más eficientes para mitigar los impactos de la pandemia en el mercado laboral.

Según Felipe Berger, economista y académico de la Universidad del Desarrollo, si no fuera por esta herramienta, la cantidad de desocupados hubiese sido hasta un 7% más alta.

La comisión de Trabajo de la Cámara de Diputadas y Diputados dedicará una sesión exclusiva a tratar la eventual extensión de esta norma, como también otras que terminaron junto con el estado de excepción, como el “postnatal de emergencia”.

El presidente de esta instancia, el diputado DC, Gabriel Silber, señaló que hay que analizar si prescindir de estas herramientas sería prematuro.

En el oficialismo la opinión no es tan distinta. El diputado de RN, Frank Sauerbaum, reconoció que los apoyos deben ir retirándose en la medida que la economía se recupere, pero apostando por mayor gradualidad.

De acuerdo a los datos del Ministerio del Trabajo, hasta 864 mil 360 trabajadores y trabajadoras tuvieron que recurrir a la suspensión de contratos en los 18 meses de su duración, de los cuales 65 mil se mantienen en esa condición.