La pandemia provocada por el Covid-19 sigue causando estragos a nivel global, dejando un saldo hasta el momento de más de 460 mil muertos.

Es por esto que diferentes laboratorios e instituciones alrededor del mundo se encuentran trabajando a toda máquina para desarrollar una vacuna contra el virus.

Bajo este contexto, uno de los equipos de investigadores que se encuentra más avanzado son los del Institute Jenner de la Universidad de Oxford, quienes en el mejor de los escenarios, podrían tener una vacuna a comienzos de octubre.

Así lo afirmó el profesor Adrian Hill durante su participación en el ciclo de webinar sobre el Covid-19 de la Sociedad Española de Reumatología (SER).

“Si todo va bien, tendremos los resultados de los ensayos clínicos en agosto/septiembre. Teniendo en cuenta que estamos fabricando en paralelo, estaremos listos para entregar a partir de octubre, si todo va bien”, sostuvo el experto.

El investigador entregó algunos detalles sobre la vacuna que están desarrollando, indicando que está basada en virus vivos, en este caso el adenovirus. Lo interesante es que tiene una elevada capacidad de replicación, lo que facilitaría su producción a gran escala.

De esta manera, se podrían obtener mayores dosis en menor tiempo y a un coste más bajo.

“Esta vacuna ha demostrado muy buenos resultados en los ensayos con chimpancés y ya ha pasado a la siguiente fase de ensayos en humanos”, sostuvo el especialista.

El profesor Hill añadió que una de las ventajas al inicio fue demostrar “que inoculaciones similares, incluida una el año pasado contra un coronavirus anterior, eran inofensivas para los humanos”.

Tal como recoge la Sociedad Española de Reumatología a través de un comunicado, por ahora no se sabe con certeza por cuánto tiempo la vacuna que está en desarrollo podría inmunizar al paciente, aunque debido a sus características, se cree que podría ser anual.

Aunque los resultados obtenidos son prometedores, llevando la Universidad de Oxford la delantera en esta carrera contra el tiempo frente al Covid-19, no es la única que ha logrado buenos avances.

De hecho, la vacuna experimental de la biotecnológica estadounidense Moderna, cofinanciada por el gobierno de Estados Unidos, entrará en la tercera y última fase de ensayos clínicos en julio con 30.000 voluntarios, anunció hace algunos días la compañía.

Se trata de la fase decisiva de los ensayos, que permitirá ver, en una gran muestra de personas sanas, si la vacuna es más efectiva que un placebo para prevenir la infección por el nuevo coronavirus.