En “Cada vez que digo mamá", la protagonista es una mujer que nunca ha dicho la palabra mamá.

Luego que su mejor amiga la insta a que viaje a conocer a la madre que nunca ha visto, Sara ingresa en “Cada vez que digo mamá” a un torbellino de emociones, reflexiones, ansias, miedos, archivos reales de historias familiares y, sobre todo, a revivir esa sensación indescriptible e irreparable que siente de haber sido abandonada.

Por eso, reconoce que en “Cada vez que digo mamá”, esta última palabra cae en una especie de vacío de nostalgia y melancolía, porque el verdadero peso y sentido del vocablo nunca ha pasado por su boca.

Lee también...
Teatro a Mil: Una gesta de 30 años Sábado 07 Enero, 2023 | 13:06

Una percepción mucho más fuerte para la actriz Alejandra Díaz Scharager, intérprete de Sara, ya que esta ficción que escribió Daniel Henríquez y dirige Jaime Guzmán Brantes tiene como referencia aspectos vividos por su abuela y madre reales.

Al mismo tiempo, este montaje tiene también algo de las anteriores experiencias escénicas de la actriz: en “El círculo” -un encuentro de jóvenes con padres judíos y árabes que analizan la confrontación histórica de sus ancestros- “también investigué a los integrantes de mi familia”, recuerda Alejandra Díaz.

Abandono versus perdón

En la ficción, Sara nació en Israel en un kibut y su padre, sin avisarle a su esposa, en una situación que podría evaluarse como secuestro o salvación se vino a Chile a criar a solas a la guagua. Veinte años después, desde Israel y Chile, madre e hija viajan a Miami para encontrarse, luego de la gestión realizada por la amiga de Sara.

¿En Sara predomina ansiedad, curiosidad o ánimo de pedir cuentas?

“Sara no sabe lo que va a buscar. En ella predomina el impulso de su amiga Paula al decirle que no podía ignorar su origen, que era fundamental conocer a su madre. Tal vez, viaje también en búsqueda de autoconocimiento, de una sanación respecto del abandono que vivió”.

¿Va llena de rabia?

“No. Para ella es un abandono en el silencio: su mayor dolor es que su mamá nunca la buscó. Tuvo que ser Sara quien toma la iniciativa, una mujer que no sabe qué es tener una mamá, no sabe decir mamá. De ahí viene el nombre de la obra. Tiene también algo de miedo, no sabe con qué se encontrará en Miami… pero avanza: en realidad, ambas lo necesitan y tienen que superar el miedo”.

Me imagino que el papá se opone considerando cómo se vino a Chile…

“Eso no está tan claro en la obra, sí que es un papá presente-ausente, no se sabe qué sabe. En todo caso, Sara le oculta el viaje. Nunca llega a saberlo.

“Hay algo entre estos dos adultos en relación a la guagua. Ambos viven en un kibut y los niños se crían en una guardería, no con sus padres. Mi tata no vivía con mi abuela, por lo que no supo que el abuelo se la había llevado”.

Alejandra Díaz Scharager, actriz: "'Cada vez que digo mamá' es un viaje en busca del origen"
Agencia Rizomas

Difícil perdonar si tus padres te abandonan…

“Sí. Aquí, aunque no sabe para qué quiere conocer a su madre, se deja entrever que la relación de Sara consigo mismo y la posibilidad de ser mamá, a lo que se ha negado, sea el motivo más fuerte para viajar”.

¿Buscará una culpable?

“No. Para este encuentro-desencuentro siempre nos planteamos que la idea no era crear víctima ni victimario, sino que la historia resuene en el mundo interno de los personajes y del público. Además, nadie tiene la razón.

“El planteamiento de la propuesta va más allá del perdón posible. Aunque se puedan perdonar no quiere decir que haya reparación. No hay reparación posible”.

¿Cuál es tu percepción de actriz?

“La puesta en escena contempla a tres actrices y un músico con clarinete ensayando la manera de contar una ficción que tiene base real: la historia de mi mamá, de mi abuela y abuelo. Tiene dolor, ternura, humor y situaciones cercanas a lo absurdo en momentos.

“Este proceso ha sido súper loco: como equipo llevamos mucho tiempo conversando largamente sobre el tema; la primera parte fue muy fuerte, porque me enteré de cosas de las que no tenía idea.

“Al comienzo me remecieron, pero desde que el dramaturgo escribió la ficción, solté la obra y la percibí como un material escénico. Para el estreno mi mamá estuvo presente y volví a darme cuenta que era la historia de ella. Se emocionó mucho, entendió las diferencias entre lo real y la ficción, y quiso participar en el conversatorio. La obra también la entendimos como un acto reparatorio colectivo para las maternidades del elenco”.

CADA VEZ QUE DIGO MAMÁ

Dramaturgia: Daniel Henríquez
Dirección: Jaime Guzmán Brante
Elenco: Shlomit Baytelman Albala, Carolina Larenas Henríquez, Alejandra Díaz Scharager
Diseño escénico: Koke Velis
Composición musical e intérprete: Rodrigo Belmar
Vestuario y peinados: Fabián Torres
Asistencia de dirección: Marisol López Jilberto
Producción Ejecutiva: Alejandra Díaz Scharager
Producción General: Moisés Norambuena Nachari, Marisol López Jilberto
Comunicaciones y Producción Audiovisual: Agencia Rizomas
Mori Recoleta. Bellavista 77. Viernes y sábado, 20.30 horas; domingo 20.00 horas. 6-15 enero 2023