Anthony Mancinelli es uno de los barberos más reconocidos en la actualidad, atiende entre 25 y 30 clientes al día y por muchos es sindicado como el afeitador más rápido del mundo.
Lo más increíble de todo, es que tiene… ¡105 años!
Nació el 2 de marzo de 1911, y además de su talento y experiencia, es muy conocido por la gran cercanía que logra con sus clientes, quienes en su mayoría son padres que asisten junto a sus hijos. Razones que indudablemente lo convierten en voz más que autorizada respecto al afeitado.
En conversación con el sitio de Tendencias Askmen, Mancinelli confiesa sentirse un admirador de la moda de las generaciones pasadas.
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“Las generaciones en las que la gente siempre ha tenido un corte y vello facial cuidado, donde se arreglaban para cualquier ocasión, incluso para abordar un avión”, señala el experimentado barbero.
Respecto a su principal motivación para trabajar, dice que es el orgullo. “Cuando te importa hacer un buen trabajo y estás orgulloso de ello, es notorio”, asegura el hombre, quién ha sido reconocido como el barbero más longevo del mundo, según el libro de Récords de Guinnes.
“Confía en tu barbero”
En la ocasión, Mancinelli aprovechó de dar su principal recomendación a quienes regularmente acuden a un especialista para afeitarse.
“Confía en tu barbero. Como un maestro barbero, he visto muchos estilos. Muy seguido, los hombres vienen queriendo algo en particular pero les sugiero otra cosa basándome en su tipo de cabello y al final les encanta”, señaló.
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“Con mi experiencia, y un poco de imaginación, puedo notar qué funcionará mejor para cada cliente”, agregó.
En entrevista con el sitio ABC7 de Nueva York, Anthony habló sobre como los avances en la tecnología han influido en su trabajo, indicando que han ayudado mucho para “dar mejores cortes y afeitadas”, por lo que a su juicio ha sido un complemento.
Mancinelli trabaja 5 días a la semana, maneja, vive solo e incluso se corta su propio cabello.
“Aunque trabajaría todos los días, si me dejaran”, asevera.
Mancinelli, quién es viudo, solía trabajar en su propia barbería en Liberty Street, en Newburgh, ciudad ubicada en el condado de Orange en el estado de Nueva York. Hoy en día, atiende en Antonio & Pasquale Barber Shop, en el mismo condado.
