Una mesa de trabajo para determinar de donde proviene la alteración del agua que afecta a los vecinos de Laja y Yumbel liderará la Gobernación de Bío Bío, instancia en la que serán decisivos los resultados de las muestras efectuadas en distintos sectores del río que atraviesa ambas comunas.

Cabe recordar que los vecinos de La Aguada y Puente Perales detectaron hace un año la presencia de una mancha que alteró la calidad del río Laja, con consecuencias económicas para quienes desarrollan el turismo en el lugar.

La sospecha de los afectados recae sobre la central de pasada que construye la empresa Eólica Monte Redondo, ya que su instalación coincidiría con el fenómeno.

Por este motivo la compañía determinó realizar un análisis de las aguas en distintos meses del año y varios puntos del cause.

Patricio Guerra, subgerente de la operadora, indicó que pese a que está pendiente la medición de febrero, de manera preliminar el estudio arrojó que no habría peligro para la salud de las personas.

Más allá de ésta y otras acciones que de forma preventiva ha impulsado la empresa Eólica Monte Redondo, se estableció una mesa de trabajo multisectorial con el fin de esclarecer el origen de la alteración del agua, instancia en la que son protagonistas los afectados.

En ese contexto el seremi de Medio Ambiente de Bío Bío, Richard Vargas, sostuvo que en lo inmediato realizarán un estudio que permita determinar cuan alterado está el río Laja, dado que también se presentan situaciones anormales en otros sectores del cause como Batuco y Caliboro.

Hasta el momento las aguas serían aptas para el uso recreativo, sin embargo los análisis buscarán determinar desde donde proviene la alteración y los alcances para la salud de las personas. Para ello se incluyó en la mesa de trabajo a Medio Ambiente, Salud, la DGA y la DOH, entre otros organismos técnicos.