El presidente de Sudán del Sur afirmó el lunes haber desbaratado un intento de golpe de Estado de un político rival, tras una noche de disparos en la capital Juba, donde el mandatario decretó un toque de queda.

“Fue un intento de golpe”, declaró Salva Kiir a la prensa.

También afirmó en un comunicado que el “gobierno controla totalmente la situación en materia de seguridad en Juba. Los atacantes huyeron y nuestras fuerzas los están persiguiendo”, agregó, decretando un toque de queda desde las 18:00 locales de este lunes hasta las 6:00 locales del martes en la capital, el cual luego permanecerá vigente “hasta nueva orden”.

Kiir acusó del intento a “un grupo de soldados aliados con el ex vicepresidente Riek Machar”.

Disparos y fuertes explosiones se habían escuchado en la madrugada de este lunes cerca de dos cuarteles militares en Juba, según varias embajadas y testigos.

Desde las nueve de la mañana (03:00 horas en Chile) no se escucharon más disparos, y la ciudad estaba siendo vigilada por las fuerzas del orden, según un diplomático.

Las embajadas de Estados Unidos y el Reino Unido invitaron a sus ciudadanos a evitar desplazamientos innecesarios.

La embajada norteamericana dijo haber recibido “informaciones de varias fuentes fiables sobre incidentes y tiroteos esporádicos en varios puntos de Juba”.