Las protestas se extendieron este miércoles por tercer día consecutivo en la provincia de Colón (norte) y en la capital de Panamá, pese a que el presidente Ricardo Martinelli anunció que derogará la polémica ley que desató los disturbios que han dejado al menos dos muertos.

Manifestantes marchaban por las calles de la ciudad de Colón, unos 80 km al norte de Ciudad de Panamá y algunos quemaron neumáticos en la vía de entrada de la provincia. En tanto, en varios puntos de la capital grupos de obreros y estudiantes bloquearon algunas calles, según imágenes de la televisión.

Las protestas ocurren en el marco de una huelga general que comenzó el lunes, convocada por empresarios y sindicatos en la provincia de Colón, en la costa atlántica, en rechazo a una ley sancionada el viernes por Martinelli para vender tierras de la Zona Libre de Colón (franca).

“Si el pueblo colonense no quiere que se vendan las tierras de la Zona Libre de Colón, se derogará la venta. En su lugar se aumentarán los alquileres y el 100 por ciento de ese aumento será para la provincia”, afirmó Martinelli en un comunicado.

Desde el viernes, en la provincia de Colón se han producido violentos enfrentamientos entre manifestantes y policías, con el saldo de al menos dos muertos, aunque diversas fuentes extraoficiales hablan de tres, además de decenas de heridos, entre ellos varios baleados, y detenidos.

“Si los colonenses no quieren la venta, entonces se van a derogar los artículos que tienen que ver con la venta, pero queremos sentarnos a dialogar sobre eso. Hay que coger las cosas con calma”, dijo el ministro de Economía Frank De Lima en el canal Telemetro.

El martes una delegación del gobierno viajó a Colón para reunirse con los opositores a la ley, pero éstos no acudieron porque pusieron como condición previa su derogación. Este miércoles, la misma delegación volverá a desplazarse hasta esa ciudad.

“Estamos en una situación muy difícil y la necesidad de conversación es urgente”, dijo el presidente de la Asociación de Usuarios de la Zona Libre de Colón, Surse Pierpoint, según el cual pareciera que “hay una luz” y “una apertura” para discutir el tema.

Con más de 3.000 empresas en operaciones y 30.000 trabajadores, la zona franca panameña movió en 2011 mercancías por más de 29.000 millones de dólares y aportó 1.700 millones de dólares a los 23.200 millones del Producto Interno Bruto de Panamá.