La viuda del fallecido opositor cubano Oswaldo Payá, Ofelia Acevedo, rechazó este sábado el informe oficial del accidente de tránsito en que murió su marido el domingo, y criticó no haber tenido acceso para conversar con los dos testigos extranjeros del hecho.

“Rechazo ese informe porque es el informe oficial del gobierno de Cuba y porque no he tenido ningún acceso a esa información que dicen ellos tener. No tengo por qué creer de ninguna manera en esa versión”, declaró Acevedo a la AFP.

“Además a estas alturas yo todavía no he podido entrevistarme con los dos testigos sobrevivientes del accidente”, el activista político español Angel Carromero y el sueco Jens Aron Modig, quienes “fueron las últimas personas que vieron a mi esposo vivo y tienen que saber mucho más de lo que yo sé hasta ahora”, agregó.

Las autoridades cubanas divulgaron el viernes un extenso informe que sostiene que el auto en que viajaba Payá, Premio Sajarov de derechos humanos del Parlamento Europeo 2002, se estrelló por exceso de velocidad y no por la intervención de otro vehículo, como lo afirmó la familia.

El automóvil rentado, conducido Carromero, de 27 años, circulaba a excesiva velocidad y frenó “de manera abrupta” al entrar a un tramo sin pavimento cerca de Bayamo (sureste), dijo el Ministerio del Interior de Cuba, que citó testimonios del español y de tres testigos.

Estados Unidos pidió el miércoles una investigación “a fondo y transparente” del deceso de Payá, luego de que dos de sus hijos afirmaran que otro vehículo sacó al auto de la ruta. Sin embargo, el informe de las autoridades cubanas no mencionó la intervención de ese otro supuesto vehículo.

Carromero, miembro de la rama juvenil del derechista Partido Popular que gobierna España, está detenido desde el lunes y a la luz del comunicado oficial sería procesado por infringir las normas de tránsito y causar un siniestro que dejó dos muertos: Payá, de 60 años y el opositor cubano Harold Cepero Escalante, de 31 años.

Suecia consideró el sábado que no hay ninguna razón para prohibir la salida de La Habana de Modig, de 27 años, quien permanece en La Habana en un centro de migración.

“No hay ninguna razón para no dejarlo volver a su casa” declaró el portavoz del ministerio sueco de Relaciones Exteriores Anders Jörle, interrogado por la AFP.