La definición del tiempo universal, establecida hace 40 años para calcar la hora atómica y la hora solar, está en la agenda de las reuniones de este jueves y viernes en Ginebra de los países miembros de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT).

“La reunión plenaria comenzará a las 1:00″ (10:00 horas en Chile), indicó el jueves a la AFP un portavoz de la UIT, agregando que se tomará una decisión al cabo de los encuentros previstos entre los 700 delegados de 70 países.

La hora adoptada por la mayoría de los países se conoce como “tiempo universal coordinado” (TUC), es decir la hora dada por los relojes atómicos a la que se agrega o quita de vez en cuando un segundo, llamado “segundo intercalar”, para que esté sincronizada con la hora solar.

Este sistema del “segundo intercalar” existe desde hace 40 años, y las discusiones para suprimirlo existen desde hace 10.

Entre los que promueven su supresión figuran Francia, Estados Unidos y otros países europeos, mientras que del lado de los que se oponen a esta supresión están Gran Bretaña, China y Canadá.

“El problema es que no podemos prever con antelación, si hay que agregar o no un segundo intercalar a la hota atómica, ya que todo depende de la rotación de la tierra, que puede verse afectada por acontecimientos como los terremotos”, explicó a la prensa Vincent Meens, presidente del grupo de estudios sobre este tema en la UIT.

Desde la creación del TUC y el segundo intercalar en 1972, hubo 24 segundos adicionales, el último que se agregó fue el 31 de diciembre de 2008.

En cada ocasión, esta rectificación se hace “manualmente”, indicó Meens, el último día de junio o el último día de diciembre. El procedimiento es considerado muy costosa por los detractores del segundo intercalar.

En tales intervenciones siempre “hay un riesgo de error”, y cada vez hay que verificar todo, indican los expertos del tiempo de la UIT.

Los ajustes de hora se hacen siempre el 30 de junio o el 31 de diciembre y es “por ello que nunca se lanzan cohetes esos días, debido a un eventual desfase que falsearía todos los cálculos”, indicó Meens.

La supresión del segundo intercalar simplificaría la vida de los técnicos informáticos, pero terminaría con una “distorsión” entre la hora atómica y la hora solar, que sería de “15 segundos cada 100 años”. Esta distorsión es “un tema importante de principio”, indicó la Oficina Internacional de Pesas y Medidas, que se interesa sobre el caso.

Si los estados miembros aprueban este jueves o viernes la resolución a favor de la supresión de este segundo intercalar, la medida debe ser sometida a la Conferencia Mundial de la UIT sobre las radiocomunicaciones, una cita que se celebra cada 3 o 4 años y cuya próxima edición está prevista del 23 de enero al 17 de febrero en Ginebra.