Hasta las 4 y media de la mañana duro la Convención Nacional del Partido Radical Socialdemócrata (PRSD) en Cartagena, la cual fue dirigida por el diputado Alberto Robles como presidente de encuentro.

En la actividad, que congregó a más de 450 militantes provenientes de todo Chile, se discutieron temas programáticos como la democratización del país, para avanzar hacia un sistema más participativo; la condena al sistema económico neoliberal y la creación de un proyecto social que represente a la ciudadanía; así también, se discutió sobre educación, salud, previsión social, trabajo, recursos naturales, energía, economía e ideología y principios.

En la ultima comisión, se desarrolló un acalorado debate sobre la permanencia del PRSD en la Concertación, sobre lo cual los “convencionales” decidieron dar por superado el conglomerado y a la vez, la apertura a la creación de un nuevo referente político, basado en los principios históricos del Partido Radical, que congregue a todas las fuerzas sociales y políticas de centro izquierda a través de un eje programático común, con propuestas claras que los radicales ha postulado sin variar a lo largo del tiempo, como el rol fundamental del Estado en la educación y el apoyo estatal a los emprendedores, entre otras.

En la ocasión, el presidente del PRSD, senador José Antonio Gómez expresó que ” no nos podemos ir de algo que no existe, la Concertación esta superada, lo dije en enero y lo vuelvo a reafirmar, debemos abrirnos a crear un nuevo referente que represente los intereses de la ciudadanía, intereses que el radicalismo conoce y postula desde su fundación”.

Por otro lado, la Convención en pleno decidió cambiar el nombre del PRSD y volver al histórico “Partido Radical de Chile”, rescatando la trayectoria y tradición que caracteriza a este partido en la vida republicana del país.

Finalmente, los asistentes aprobaron diversos votos políticos refundacionales, tales como una nueva declaración de principios, la exigencia al fin al lucro en la educación, la creación de un nuevo orden constitucional a través de una asamblea constituyente, el establecimiento de la educación publica como eje fundamental de igualdad social, la nacionalización del agua como bien de uso público, la creación de un nuevo modelo de AFP, el respeto policultural y multiétnico y el uso de energías renovables.