Madre acusa que abusador de su hija de 8 años está en la calle por ausencia de fiscalía en audiencia de apelación. El Ministerio Público asegura que no tenía atribuciones para alegar en tribunal de alzada

Angélica Saavedra sólo exige justicia y dice que no se quedará tranquila mientras el hombre que reconoció haber abusado en reiteradas oportunidades de su hija de 8 años camine por la calle.

La mujer estaba satisfecha con la sentencia del tribunal de garantía de Los Lagos que el 8 de agosto y tras un juicio abreviado condenó a 3 años y 1 día de cárcel a José Osvaldo Urrutia Figueroa. Sin embargo, la defensa del hombre apeló y el Tribunal de Alzada valdiviano le concedió la libertad vigilada.

Angélica está molesta porque el fiscal del caso, José Rivas, no compareció a la audiencia, y cree que el resultado sería distinto si el abogado del Ministerio Público hubiese alegado.

El fiscal Rivas defiende el procedimiento, explicando que no podía concurrir al alegato en la Corte de Apelaciones, pues él no se pronunció en el juicio abreviado a favor o en contra de que se le concedieran beneficios al condenado, por lo tanto no podía alegar sobre ello.

Rivas asegura que en términos de investigación, el Ministerio Público logró que el hombre reconociera su culpa y que los intereses de la víctima estaban garantizados por su abogado querellante. Por ello, acordó con la defensa la confesión judicial del condenado, a cambio de no pronunciarse sobre eventuales beneficios.

Y aunque el interés de la víctima se supone garantizado por la presencia del querellante particular, el fiscal Rivas explicó que éste no pidió detalles de la investigación y sólo apareció el día de la audiencia del juicio abreviado, sin que le comunicara los requerimientos de la madre de la menor abusada. Pero a Angélica Saavedra las explicaciones no le sirven. El agresor confeso de su hija camina por las calles de Los Lagos y ella tema que vuelva a atentar contra la menor.

La Radio intentó comunicarse con el abogado que representó a la víctima en la causa, José Miguel Salazar, pero éste no contestó los llamados telefónicos.