Los hombres del Cuerpo de Bomberos mantuvieron este domingo sus multitudinarias protestas en Rio de Janeiro por mejores salarios y pasaron a exigir también la liberación de 439 colegas detenidos el sábado en un violento operativo de la policía militarizada (PM).

Los 439 bomberos detenidos fueron trasladados desde uno de los cuarteles de la PM hacia un complejo de los propios Bomberos en la vecina localidad de Niterói, mientras centenas de familiares gritaban consignas en las proximidades y mostraban pancartas de apoyo a los huelguistas.

Este domingo, unos 1.500 agentes de bomberos realizaron una manifestación en el centro de Rio de Janeiro y decidieron en una improvisada asamblea mantener sus actividades en un nivel mínimo, afectando incluso la atención de emergencias en las playas de la ciudad.

Los responsables del movimiento de protesta orientaron este domingo a los bomberos a atender exclusivamente accidentes de tránsito y heridos con armas de fuego. En las playas, los bomberos que actúan como salvavidas trabajaban sin uniformes y con personal mínimo.

Frente al edificio de la Asamblea Legislativa (congreso provincial), las esposas de los bomberos montaron un verdadero campamento, con carpas y cocinas improvisadas.

Aún era visible la tensión entre los bomberos después de la violenta acción policial que en la mañana del sábado invadió el Cuartel General de Bomberos en Rio de Janeiro, que los agentes habían ocupado para negociar mejoras salariales.

El gobernador de Rio, Sergio Cabral, emitió una nota oficial este domingo en la que condenó la actitud de los bomberos en protesta por la “inconmensurable gravedad de unir niños y armas”, en referencia a la ocupación del Cuartel General de la corporación, que terminó el sábado en la mañana.

La influyente Orden de los Abogados de Brasil (OAB) emitió este domingo una nota oficial donde afirmó que los salarios de los bomberos son “reconocidamente humillantes”, pero sostuvo que la ocupación del Cuartel General fue una medida inaceptable, motivando la acción policial.

El nuevo comandante de los Bomberos, el coronel Sergio Simoes, mantuvo reuniones todo el domingo. “La prioridad es garantizar que se normalice la atención a la población. Tenemos un compromiso con la población. Todo lo que ha ocurrido nos duele”.

Por su parte, el comandante del Batallón de Choque de la PM, el coronel Waldyr Soares, dijo a la prensa que los 439 bomberos detenidos podrán ser formalmente acusados de motín, ya que los Bomberos son una corporación militar, y con ello quedarían expuestos a penas de 3 a 8 años de prisión.