Varias decenas de miles de tunecinos, en su mayoría estudiantes, reclamaban el viernes la salida del jefe del gobierno de transición Mohamed Ghannouchi, ante la Kasbah, epicentro de la protesta que acabó con la renuncia de Zine El Abidine Ben Ali en enero.

Mohamed Ghannouchi | Wikipedia

Mohamed Ghannouchi | Wikipedia

Algunos agentes policiales adelantaron la cifra de “más de 100.000 manifestantes”. La gente seguía llegando al lugar de concentración, vigilado desde el aire por helicópteros del ejército.

Según miembros de la Media Luna Roja (Cruz Roja) y de manifestantes en el lugar, “se trata de la mayor manifestación desde la caída de Ben Ali”, el 14 de enero.

“Ghannouchi vete”, “Ya basta con los decorados”, “Vergüenza a este gobierno” gritaban los manifestantes. Otros enarbolaban pancartas en las que se podía leer “Ghannouchi, tu insistencia muestra que escondes tu mala fe”.

“Revolución hasta la victoria” y “Adelante los defensores de la libertad”, “Arranquemos la represión de nuestra tierra”, “Ghannouchi agarra tus perros y dimite”, “No a la confiscación de la revolución tunecina”, gritaban otros manifestantes que atravesaban la avenida central Habib Bourguiba en dirección a la Kasbah.

Tibini Mohamed, estudiante de 25 años espetó: “Estamos aquí para hacer caer al gobierno”.

El primer ministro trasladó sus oficinas a finales de enero de la Kasbah al palacio presidencial de Cartago, en las afueras de Túnez, después de una primera manifestación en la que los tunecinos acamparon durante una semana frente a la misma.

Cerca de 4.000 manifestantes se manifestaron el domingo ante la Kasbah, para reclamar la dimisión del gobierno provisional, la elección de una asamblea constituyente y el establecimiento de un sistema parlamentario.

Recordemos que Mohamed Ghannouchi fue primer ministro de Ben Ali de 1999 hasta su caída el 14 de enero a raíz de la presión popular.

Después de la formación, el 17 de enero, de un gobierno de unión nacional en el que el equipo saliente había conservado la mayoría de las carteras, miles de personas salieron a manifestarse diariamente para obtener su dimisión.

Bajo la presión de la calle, Ghannouchi reformó el gobierno de transición y depuró a los principales caciques del antiguo régimen el 27 de enero.