El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge, dijo este lunes que la investigación que desarrolla su institución sobre sus miembros salpicados por las acusaciones de corrupción a la FIFA terminará dentro de unos meses.

“La comisión está trabajando con la debida diligencia y no es algo definitivamente para mañana sino, en mi humilde opinión, que durará unos meses”, según apuntó Rogge ante la prensa.

El COI puso a trabajar a su Comisión Ética hace dos semanas para examinar las pruebas facilitadas por un reportaje de la BBC (televisión pública británica) que acusó a tres oficiales de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) de corrupción.

Las acusaciones concernían, entre otros, al presidente de la Confederación Africana de Fútbol, que pasó a formar parte del COI en 2001, Issa Hayatou, además de su homólogo sudamericano, el paraguayo Nicolás Leoz, y del brasileño Ricardo Teixeira.

A los tres se les acusó de haber recibido pagos secretos de una empresa de márketing, ISMM/ISL, detentora de los derechos televisivos del Mundial, hace una década y antes de que se declarara en bancarrota.

Rogge insistió que era la Comisión Ética del COI el organismo que decidiría cuántos responsables de la institución debían ser investigados y sugirió que las pesquisas podrían concernir casos que hayan ocurrido antes de que los máximos dirigentes hayan integrado la organización olímpica.

“La Comisión Ética mirará el tema y decidirá qué personas deben ser investigadas”, señaló Rogge. “Todo el tema es una cuestión de reputación del COI”, adujo, señalando la necesidad de “respetar el código de confidencialidad” bajo el que trabaja la citada comisión.

“En su debido momento, saldrán a la luz, tras la investigación, las propuestas precisas y el Comité Ejecutivo tomará una decisión sobre las mismas”, sostuvo. “Pero no estamos ahí todavía, seguimos en la fase de investigación”, añadió.

La FIFA apuntó por su parte que las investigaciones relativas a ISMM/ISL en 2001 ya están terminadas, después de que un tribunal suizo castigara a tres responsables de la firma por delitos contables y malversación.