Poca gente en las salas de espera y la entrega parcial de atención marcó la primera jornada de paralización de actividades de trabajadores de la salud municipalizada en la región del Bío-Bío. El representante de los municipios de la región dice entender el fondo de la protesta, pero no la forma.

No hubo una alta demanda en los consultorios de la región del Bío- Bío en la primera jornada de paro nacional. De todos modos cada uno de los establecimientos de atención primaria cuenta con un turno ético que está evaluando los casos urgentes, que aseguran no dejarán de asistir, así como tampoco de entregar remedios a crónicos ni la leche para los menores.

Pero algunos tipos de atenciones no se entregaron, y los usuarios sienten que tendrán que rezar para reprogramar la hora. En todo caso, los trabajadores aseguran que a las personas que se vean perjudicadas en este aspecto, se intentará cambiar su hora a la brevedad posible.

Y también hubo palabras para el Ministro de Salud Jaime Mañalich, quien sentenció que no se puede colocar en la balanza la atención a los pacientes con el financiamiento de vacaciones pagadas para los funcionarios, en relación con el término de capacitaciones en Cuba. Esta situación fue calificada por Aida Díaz, presidenta regional de la Confusam como una “ofensa gratuita”

También se refirió al paro el Presidente Regional de la Asociación de Municipalidades, Marcelo Rivera, quien dice que está de acuerdo con el fondo de la protesta porque después del terremoto el área de salud se vio trastocado en materia de recursos con que se cuenta, pero no se debe castigar a la población por ello.

La Confusam Regional atribuyó el 98% la adhesión al paro en la zona, lo que esperan mantener este jueves, cuando continúa la protesta.