Los precios del petróleo se estabilizaron este lunes en Londres y Nueva York, donde el mercado estuvo presionado entre el pasaje sin consecuencias de la tormenta Bonnie y un eventual retroceso de los stocks de crudo en Estados Unidos.

En el New York Mercantile Exchange (Nymex), el barril de West Texas Intermediate (designación del “light sweet crude” negociado en EEUU) para entrega en setiembre terminó -al igual que el viernes- en 78,98 dólares.

En el Intercontinental Exchange de Londres, el barril de Brent del mar del Norte con igual vencimiento, evolucionó en una banda muy estrecha, ganando solamente 5 centavos a 77,50 dólares.

“Hubo un leve movimiento a la baja al comienzo de la sesión, pero la mayoría de los analistas que contribuyen en el cálculo del consenso publicaron sus previsiones de evolución de los stocks (de petróleo en EEUU) esta semana, ello impulsó al mercado hacia arriba”, explicó Jason Schenker, de Prestige Economics.

Los analistas “esperan un descenso de las reservas de crudo y en consecuencia el mercado se estabilizó”, agregó.

La posibilidad de que se reduzca la oferta de crudo, actualmente muy abundante, compensó la distensión de los inversores luego de que la tormenta Bonnie evitara las instalaciones petroleras del golfo de México.

El viernes, la formación de la tormenta había hecho subir los precios del crudo a sus niveles más altos desde mayo, cuando se orientaba hacia el Golfo, donde se concentra cerca de 30% de la producción de oro negro en Estados Unidos.

Pero “Bonnie se disipó durante el fin de semana y evitó las refinerías e instalaciones de producción offshore (marítima)”, subrayó Mike Fitzpatrick, de MF Global.

“Actualmente hay una importante cantidad de crudo, productos destilados y gasolina en reservas, suficiente para soportar varias fuertes tormentas”, agregó el analista.

Luego de que varias petroleras suspendieran sus operaciones como medida precautoria, cerca de la mitad de la capacidad de producción de crudo había sido suspendida. Pero desde el lunes, solamente 27% de la capacidad permanecía fuera de servicio, según las autoridades estadounidenses a cargo de la administración de recursos marítimos.

Los precios del petróleo borraron sus pérdidas además con el apoyo de los mercados bursátiles, que se beneficiaron con una recuperación más fuerte que lo previsto de las ventas de viviendas nuevas en junio en Estados Unidos y de previsiones de beneficios más optimistas por parte del grupo de mensajería Fedex.