En víspera de las vacaciones de Semana Santa, que los costarricenses aprovechan para ir a la playa, las autoridades sanitarias alertaron que los actuales niveles de rayos ultravioletas favorecen la aparición de cáncer de piel, daños oculares y envejecimiento prematuro.

Por ello es necesario utilizar bloqueadores solares de factor alto, gafas de sol y no permanecer expuestos al sol por más de veinte minutos seguidos ni en las horas del mediodía, que es cuando el sol es más intenso, según el experto Jaime Wright Gilmore, meteorólogo de la Universidad Nacional (UNA), citado por el diario La Nación.

La recomendación se aplica no sólo para los bañistas, sino para transeúntes o fieles que asisten a procesiones religiosas en lugares ubicados a 2.000 metros por encima del nivel del mar.

Según Wright, el país tiene “notas muy altas”, de más de 11, en el llamado Índice de Radiación Ultravioleta, que califica la intensidad de la radiación solar e indica la capacidad de los rayos de producir lesiones en la piel.

Creado en 2004 por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la categoría mínima va de 0 a 2, la baja de 3 a 5, la moderada de 6 a 7 y la alta de 8 a 10.

En el caso de Costa Rica, oscila entre 11 y 13, lo que la clasifica en la categoría de radiación “muy alta”.

Los datos de la UNA muestran que la radiación ultravioleta va a continuar en alza durante abril, cuando se prevé que llegue a unos 15 puntos.

Esto equivale a un 27% más de radiación ultravioleta que en diciembre, mes que registra la menor radiación en Costa Rica, según el diario.