El municipio de Tomé representado por su alcalde, Eduardo Aguilera, fue condenado a pagar una indemnización de $5 millones 700 mil por el despido injustificado de un funcionario municipal.

Según el Tribunal Laboral, el despido del director de educación Gastón Díaz, en el año 2006 no estuvo acorde a la ley.
El ex funcionario municipal no quedó conforme con el proceso debido a que su contrato de trabajo nunca apareció.

El abogado que llevó la causa, Gorky Díaz, dijo que esta condena sienta un precedente en relación al actuar de los alcaldes en sus administraciones.

El caso pasó por tres instancias distintas para llegar a un desenlace; el Tribunal Oral, la Contraloría Regional y el Tribunal Laboral, y sólo este último fue capaz de dictaminar sobre el tema.