El juicio abierto hace un mes en un tribunal de París para esclarecer el caso Clearstream, una maquinación política que enfrentó a dos enemigos, el actual presidente francés Nicolás Sarkozy y el ex primer ministro Dominique de Villepin, llegó el viernes a su último día.
Fuente: Agencia AFP.
El veredicto del tribunal correccional que juzgó a 5 inculpados, entre éstos el ex jefe de Gobierno por “complicidad en denuncia calumniosa”, se conocerá a principios de 2010.
Tras un mes de audiencias, el juicio confirmó su carácter político, pues fue en ese terreno en el que se ubicó la defensa de Villepin, acusado de participar en una conspiración para desacreditar a Sarkozy, cuyo nombre apareció en falsos listados de cuentas bancarias ocultas en la sociedad luxemburguesa Clearstream.
En 2004, Villepin y Sarkozy aspiraban a convertirse en candidatos de la derecha francesa a las elecciones presidenciales de 2007.
La Fiscalía francesa pidió el martes 18 meses de prisión con suspensión de pena para Villepin, lo que evita su ingreso en prisión, y 45.000 euros de multa.
“Nicolás Sarkozy había prometido colgarme del gancho de un carnicero, veo que se cumplió la promesa”, reaccionó enseguida Villepin, retomando una expresión de Sarkozy cuando el caso Clearstream salió a la luz.
Al inicio del juicio, Villepin había denunciado el “ensañamiento” de Sarkozy en su contra. El presidente francés es uno de los querellantes civiles.
“Este juicio lleva la marca del deseo, de un deseo casi histérico de un niño caprichoso”, afirmó uno de los cuatro defensores de Villepin, Luc Brossolet.
Uno de los abogados del presidente galo, Thierry Herzog, acusó a Villepin de ser el autor intelectual de la maquinación.
En el último día de audiencias, los abogados del ex vicepresidente del fabricante aeronáutico europeo EADS Jean Louis Gergorin, considerado por la fiscalía como el principal instigador de la manipulación, presentaron su alegato final.
La fiscalía pidió contra Gergorin la pena más elevada: tres años de cárcel, la mitad firme, y 45.000 euros de multa.
Contra el matemático franco-libanés Imad Lahoud, acusado de falsificar las listas de cuentas bancarias, la fiscalía pidió 2 años de cárcel -18 meses firme- y la misma multa.
La fiscalía pidió la puesta en libertad para el periodista Denis Robert y 4 meses de prisión con suspensión de pena para el ex becario Florian Bourges.