El Caligus rogercresseyi, más conocido en Chile como “piojo de mar”, que ataca al salmón, se está haciendo resistente a uno de los antiparasitarios más utilizados en la industria salmonera, el azametifos.
Así lo demostraron los más recientes resultados del programa del Instituto del Fomento Pesquero (IFOP), Determinación y monitoreo de la resistencia de Caligus rogercresseyi a antiparasitarios aplicados en la salmonicultura nacional, correspondiente a los años 2024-2025.
Jaiber Solano, investigador principal del IFOP, presentó los hallazgos durante un taller virtual, donde informó que este parásito es menos susceptible al fármaco.
El programa, que investiga la resistencia del piojo de mar desde el 2017, ahora en su octava etapa, encontró que los resultados recién presentados significan una reducción significativa en comparación con los estudios previos.
Resulta que la susceptibilidad del Caligus rogercresseyi al azametifos, insecticida común en la piscicultura del salmón, fue solo del 66,7% con la dosis terapéutica.
Al día de hoy, se han realizado 95 muestreos y 254 bioensayos válidos, abarcando muestras de 28 Agrupaciones de Concesiones de Salmónidos (ACS), según recoge la revista especializada Fish Farming Expert.
Solano explicó que al evaluar la concentración efectiva del azametifos, que es la concentración del fármaco necesaria para acabar con el 50% de los parásitos, esta ha aumentado un 37,1 %.
De los fármacos que se utilizan, el con mayor porcentaje de no susceptibilidad del piojo de mar fue el azametifos, con un 33%, mientras que la cipermetrina registró un 6,4%.
La cipermetrina hasta ahora es el fármaco con mayor cantidad de poblaciones de piojo de mar susceptibles, ya que afecta al 80% o más de los piojos de mar.
Tratamientos no farmacológicos para el piojo del salmón
Solano también reveló resultados de bioensayos que evaluaron la susceptibilidad del piojo de mar a algunos tratamientos no farmacológicos, como el uso de peróxido de hidrógeno, Lyptus Plus y agua dulce.
El peróxido de hidrógeno (agua oxigenada) ha mostrado un aumento de la concentración efectiva desde el 2022, pero no significativo, concluyó el investigador.
Por otro lado, el Lyptus Plus, que es un extracto vegetal que se usa para “bañar” a los salmones y eliminar el piojo, ha mostrado que mata al 93,3%, una efectividad del 100% con su dosis terapéutica.
Aclaración:
En la nota se había sugerido que la resistencia del piojo de mar a los fármacos podría aumentar las dosis que se administran a los salmones, pero Jaiber Solano, investigador principal de IFOP, nos aclaró que la resistencia del piojo no significa necesariamente que se aumenten.
“Se requieren concentraciones más altas para afectar al 50% de los parásitos en laboratorio, pero esto no implica ni autoriza que se estén aumentando las dosis en tratamientos reales en el campo”, aclaró.
“Por normativa, las dosis de antiparasitarios están reguladas por el Servicio Agricola y Ganadero (SAG) y el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) y no pueden ser modificadas por decisión de las empresas”, explicó el investigador.