Hasta la Casa Nacional del Niño en Ñuñoa, llegó el fiscal Patricio Poblete para obtener antecedentes de la muerte de James Gaete Tamayo, ocurrido a inicios de julio pasado, a poco de cumplir tres años.

Acompañado del persecutor, llegó la doctora Pamela Borquez del Servicio Médico Legal, junto a su equipo formado especialmente para indagar las muertes de niños en centros a cargo del Sename.

El menor, que se recuperaba de un trasplante de riñón, murió, aparentemente, por no recibir los tratamientos necesarios de la operación.

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A la salida de la diligencia, Poblete dijo que “por orden del fiscal Marcos Emilfork -a cargo del caso Sename- dispuso al Servicio Médico Legal la formación de un equipo especial para investigar todos los casos Sename a nivel nacional”.

“Hoy, la concurrencia al centro es para esta establecer e investigar la muerte de James Gaete, ocurrida durante este año. La concurrencia de la doctora Pamela Borquez con el equipo del SML es para ver en terreno los cuidados que debían realizarse por parte de la casa y el Sename al menor fallecido“, enfatizó.

Tras la muerte del pequeño, su madre acusó negligencia del personal del recinto, señalando que las condiciones de atención no eran óptimas.