La supuesta falta de agua para combatir el incendio de este lunes en Valparaíso -que fue denunciada por vecinos e incluso por bomberos- ha levantado otra vez la polémica en torno a la capacidad de la ciudad para enfrentar este tipo de situaciones.
Críticas que incluso se han extendido a Bomberos quienes también reclamaron por la falta de este elemento.
El intendente regional, Gabriel Aldoney, afirmó que la información inicial fue que hubo problemas por el corte eléctrico.
Por su parte, la empresa Esval informó que el siniestro se inició en Laguna Verde, zona fuera de la concesión y operación de la sanitaria.
Luego, la emergencia se expandió hasta el sector de Montedónico, donde se apoyó con la apertura de grifos y la carga de vehículos de emergencia de Bomberos.
Incluso el Comandante de Bomberos, Rodrigo Romo, aseguró que Esval requiere generadores propios, aunque la empresa desmiente esta afirmación asegurando que efectivamente durante el día del incendio se registró una baja en los niveles de los estanques de agua potable.
Debido a lo anterior, desde la sanitaria sostienen que activaron sus grupos de respaldo eléctrico para mantener la continuidad del suministro de agua en la zona afectada.
Desde la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi), Guillermo de la Maza, señaló que no hubo falta de agua, asegurando que Bomberos ha cambiado su estrategia y se establecieron piscinas de abastecimiento donde los camiones hacen su descargas.
Incluso la ministra de Vivienda, Paulina Saball, afirmó que el abastecimiento de agua incluso se vio reforzado por los estanques estacionarios que fueron instalados luego del mega incendio de 2014.
Por lo pronto y mas allá de la polémica por la falta de agua, la investigación sigue en curso por parte de la PDI a través de la Brigada de Investigación de Delitos Ambientales.
Las pericias, según el Comisario Marco Orellana, ya han podido determinar el área de inicio, por lo cual ahora falta establecer el punto de origen.
Lo que si está claro es que se ha descartado que el inicio de las llamas haya sido en el predio perteneciente al Ejército, como lo dijeron las autoridades al principio.
Aunque finalmente continúa la duda sobre si existió o no falta de agua, la velocidad en la reacción de los servicios de emergencia o si el siniestro se pudo haber evitado enviando de forma inmediata personal para atacar las llamas.
