Un duro golpe sufrió el emblemático proyecto del Gobierno de reforma a la Educación Superior, luego del rechazo a la idea de legislar en la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados.

Tras el traspié, La Moneda buscará el apoyo de los parlamentarios oficialistas en la Sala, para dar curso nuevamente a la tramitación del proyecto. De lo contrario, la iniciativa quedaría “durmiendo” en el Congreso por al menos un año.

Por lo anterior, el Gobierno llegó a un entendimiento con la presidencia de la Cámara de Diputados, para modificar la urgencia inmediata del proyecto y evitar que se vote este jueves en la Sala, aplazándolo hasta el próximo lunes.

Esto último, con el fin de dar tiempo al ministro Nicolás Eyzaguirre para aglutinar los votos de la Nueva Mayoría y conseguir su aprobación. Pero también, evaluar incluir la propuesta de la bancada del Partido Comunista.

Y es que uno de los proyecto más emblemáticos del Gobierno de la presidenta Michelle Bachelet, se cayó precisamente gracias a la abstención de la diputada Camila Vallejo, que declinó dar su apoyo a la idea de legislar, luego que no se incluyera de forma explícita la eliminación del Crédito con Aval del Estado (CAE) a partir de 2018.

Al respecto, la propia presidenta Bachelet salió a pedir responsabilidad a los parlamentarios oficialistas y recordó que “con diálogo hemos realizado avances impensados hace cinco años”.

En ese sentido, hizo un llamado a “pensar en Chile”, en un mensaje directo a lo sucedido con la exdirigente estudiantil.

Al respecto, la parlamentaria comunista respondió al emplazamiento asegurando que el Gobierno también debe ser responsable con los compromisos que adquiere con sus congresistas.

Esto último, en alusión al protocolo de acuerdo que se firmó con la ministra de Educación, Adriana Delpiano, antes de que se iniciara la sesión en la Comisión.

En ese sentido, Vallejo pidió al Ejecutivo que haya espacio para que se incluya la eliminación del CAE.

Asimismo, la diputada del PC advirtió y aclaró que la votación de ayer martes obedece al espíritu que tendrá la bancada comunista, de no aprobarse estos cambios.

En el Congreso, en tanto, se han registrado reuniones sucesivas por parte de la ministra de Educación, Adriana Delpiano, quien ha estado en conversación permanente durante la mañana con su par de la Secretaría General de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre.

Lo anterior, para buscar los votos y la salida para destrabar definitivamente este proyecto de ley que cumplió 10 meses a la espera de ser votado, y que sufrió un duro revés tras el rechazo en la Comisión de Educación.