Imputado por el delito de homicidio simple con dolo eventual quedó Francisco Javier Sanhueza, chofer de Tur Bus que este sábado desbarrancó en la ruta Mendoza-Chile dejando a 19 personas muertas, dos de ellas de nacionalidad chilena.
Lo anterior, a pesar de que la información preliminar decía que el fiscal de Mendoza, Gustavo Pirrello, formalizaría a Sanhueza por homicidio culposo -sin intencionalidad-.
Pirello explicó esta acusación más gravosa, asegurando que “no solo es un manejo descuidado. Dolo eventual es aquel en que se representa el daño que se puede ocasionar y, sin perjuicio de eso, se actúa sin importar el resultado”.
Una de las razones de esta imputación contra el chofer es que el otro conductor que estaba descansando (Pedro Vargas) y los propios pasajeros del bus declararon que hubo reclamos por exceso de velocidad, a los que Sanhueza hizo caso omiso. Así lo detalló Alejandro Gullé, procurador general de la Corte de Mendoza.
Sumado a lo anterior, Gullé, en declaraciones recogidas por Radio Nihuil de Mendoza, aseguró que el bus iba a 100 km/h en zona de máximo 40. El procurador explicó el porqué de la gravedad de los cargos, cuyas penas van de los 8 a los 25 años.
Consultado sobre la eventual responsabilidad de los dueños de la empresa, Gullé señaló que no tienen responsabilidad penal, pero que sin duda existirán consecuencias civiles, como la debida indemnización a las víctimas y/o sus familias.
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Según consignó Emol la gravedad de este accidente lo deja como la mayor catástrofe en la historia vial de la provincia de Mendoza.
Francisco Javier Sanhueza guardó silencio en su audiencia, efectuada este domingo, y quedó en prisión preventiva en el penal de Boulogne Sur Mer.
La empresa aseguró que aún no han tenido comunicación con el chofer, pero que sí han hablado con su familia, quienes han solicitado apoyo para traslado a Mendoza y para asesoría jurídica.
