La “afluenza” es una palabra que muy pocos conocen, su significado tiene relación con lo que le sucede a las personas millonarias, o con mucho dinero, que no saben medir las consecuencias de sus actos.

Se usa generalmente como broma para expresar el “desprecio hacia el consumismo”, a pesar de eso el término puede tener más verdad de la que nos gustaría pensar, consigna HuffingtonPost

“Afluenza” fue el término utilizado para un joven de 16 años que atropelló y mató a 4 personas, mientras conducía una camioneta en Texas. El adolescente afirmó que fue la riqueza de su familia la que lo eximió de aquella responsabilidad., que contemplaba nada menos que 10 años de libertad condicional y una terapia (que su familia pagará).

Un psicólogo que participó como testigo de la defensa, G. Dick Miller, argumentó que el niño sufría de Afluenza, lo que le habría impedido comprender la situación en la que estaba metido.

Aunque el término se use o no, finalmente, lo que si ocurre es que el dinero cambia la vida de las personas y quienes pertenecen a una clase social alta tienden a verse a ellos mismos como seres diferentes.

Psicólogos que estudian el impacto del dinero en las personas han descubierto que el dinero puede influir poderosamente en nuestros pensamientos y acciones. Aunque la riqueza es subjetiva, la mayor parte de lo que consideramos como tal tiene que ver con las escalas de ingresos, condición de empleo o circunstancias socio económicas, incluyendo el nivel educativo.

Aquí hay 7 cosas que deberías saber sobre la psicología del dinero:

¿Más dinero, menos empatía?

Mike fleming (CC)

Mike fleming (CC)

Diversos estudios han demostrado que el dinero podría estar en contraste con la empatía y la compasión. Una investigación que publicó Psychological Science, demostró que las personas de bajo nivel económico eran mejores leyendo las expresiones faciales de los demás, un claro signo de personas empáticas.

Michale Kraus, coautor del estudio, explicó que los entornos en los que viven las personas de clase alta y baja son muy distintos. Personas de escasos recursos deben responder a vulnerabilidades y amenazas sociales de la marginalidad.

Por eso funcionan mejor los equipos de trabajo donde debes depender de otros ante una amenaza social o una oportunidad exitosa. Esto te hace más perceptivo a las emociones.

Mientras tener menos recursos aumenta tu inteligencia emocional, la persona que tiene más recursos pierde el respeto por las demás. Un estudio de la Universidad de Berkeley, encontró que incluso el dinero falso podría hacer que estas personas se comporten con menos respeto por las demás.

Se observó que mientras dos estudiantes jugaban Monopoly, el que tenía más dinero (falso) que el otro se manifestó molesto y se burló del que tenía menos, incluso actuó de manera agresiva.

La riqueza puede nublar el juicio moral

Steve Hankins (CC)

Steve Hankins (CC)

Puede hacerlo y muchas veces lo hace. La Universidad de Berkeley concluyó tras un estudio en las calles, que los vehículos más costosos eran los que menos respetaban los ceda el paso. Eran sólo aquellos de precios más accesibles, los que permitían el paso de las demás personas para cruzar la calle.

La Universidad de Harvard y la Utah, encontraron que aquellas personas que más piensan en dinero son las que tienen comportamientos menos éticos. Siendo éstos más propensos a mentir, entre otras acciones.

La riqueza se ha relacionado con la propensión a la adicción.

Images Money (CC)

Images Money (CC)

La riqueza se ha relacionado con mayor susceptibilidad a tener problemas de adicción.

Algunos estudios han encontrado que los niños y niñas “pudientes” son más vulnerables al abuso de sustancias. Los estudios también han encontrado que estas personas no están exentas de problemas de socialización. Ésta sería una de las razones por las cuales los niños de altos recursos entrarían en las adicciones.

El dinero en sí puede llegar a ser adictivo.

Reynermedia (CC)

Reynermedia (CC)

La búsqueda de dinero puede ser adictiva. La necesidad de querer poseer más y más dinero es clasificado como parte de una clase de comportamientos conocidos como “acciones conductuales”.

También puede ser una adicción “la necesidad de gastar dinero”, el paso siguiente a querer tenerlo todo. Esto puede concluir, en última instancia, en comportamiento negativo o perjudicar la vida del adicto.

Los niños ricos pueden ser más problemáticos.

Edward Simpson

Edward Simpson

Pueden tenerlo todo, joyas, viajes o fiestas, pero todo a un costo elevado. Los niños ricos pueden ser más propensos a la depresión, ansiedad y angustia, o trastornos de alimentación, además de más mentirosos.

Tendemos a percibir a los ricos como “el mal”.

rabbot (CC)

rabbot (CC)

Desde el otro lado, las personas de bajos recursos tienden a juzgar y estereotipar a los que son más ricos. Aunque también es cierto que los de bajos recursos luchan por erradicar los estigmas sociales en contra de ellos.

Los ricos tienden a ser una fuente de envidia y desconfianza según la Universidad de Pennsylvania. Lo que aleja a estas personas unas de otras.

El dinero no puede comprar la felicidad o el amor.

Sheila Tostes (CC)

Sheila Tostes (CC)

Tendemos a creer que después de encontrar el dinero, vendrá el éxito. Pero no. La riqueza no tiene relación con la felicidad o con el amor. Incluso el dinero podría ser perjudicial para el bienestar.