No puedo dejar de comenzar esta columna sin felicitar a Radio Bío-Bío por el esfuerzo que hace al publicar el “Especial Dakar 2011” en su portal web, y por la cobertura a la prueba de rally cross country más extrema e importante del mundo, que nos anticipa cinco informadores diarios e información permanente con los despachos del enviado especial, Hans Hott.

Tampoco puedo dejar de manifestar lo extraño que es para mí esta experiencia: acercarme al Dakar desde un computador, escribiendo en él, y no estar ahí, arriba de una moto, buscando la meta. Lamentablemente, una grave lesión me dejó fuera de la competencia y terminó con mis expectativas, que eran altas, considerando que el año pasado fui el mejor debutante y terminé 22 en la general. Espero estar el 2012 y desquitarme de esta ausencia.

Pero vamos a lo que vinimos: ya no queda nada y el ambiente en Buenos Aires está absolutamente “prendido”, con toda la expectación y revuelo que genera el Dakar. Hoy para los pilotos es el primer día de verificación técnica en La Rural y marca el inicio de la cuenta regresiva para la largada.

Comenzará oficialmente el Dakar 2011en el tradicional Obelisco de Buenos Aires, en plena Avenida 9 de julio. Lo que ahí se vive, es difícil de describir: como experiencia, es inigualable, y paga todos los esfuerzos hechos para estar allí. El fervor de la gente, el ruido de los motores y la adrenalina que fluye sin descanso, hacen de ese momento algo único, mágico, imposible de olvidar. Es lo que todo piloto aspira a vivir en su carrera… un Dakar… es impresionante lo que es un Dakar.

Esta primera etapa contempla un enlace de 377 kms., hasta la localidad de Victoria, y sorprenderá a los pilotos con la ansiedad propia de verse frente a un evento tan importante, después de una noche de año nuevo tranquila, celebrada con una comida liviana y entre el círculo más íntimo de cada competidor.

La primera etapa se desarrolla sólo por carretera y sirve para liberar tensiones, soltar la ansiedad e ir acostumbrándose a las motos. Se ve mucha gente y se siente la emoción de la partida, pero, con la música del Ipod como compañera, no se deja de pensar en la meta, ahí, en el mismo Buenos Aires. A diferencia de las versiones anteriores, en esta oportunidad sólo se trata de un enlace, que los pilotos deben cubrir en un máximo de tiempo.

El 2 de enero, muy de madrugada, arranca la verdadera competencia. Se realiza entre Victoria y Córdoba y contempla un largo Enlace de 566 kms. más una Especial de 192 kms. para las motos y los quads, que invita a acelerar a fondo, por caminos muy rápidos pero complejos, por la cantidad de curvas con que los pilotos se encuentran, en dirección hacia la montaña.

Así comienza la aventura de un Dakar que, como nunca, tiene a un chileno con posibilidades de ganar. Francisco “Chaleco” López, arriba de una Aprilia, va en un 100% física y mentalmente, con una puesta a punto total de su moto, y con la experiencia del tercer lugar alcanzado en la versión anterior, nos permite ilusionarnos con que puede amagar a Cyril Despres y Marc Coma, sin duda, los grandes favoritos. Además, a partir de este año, todos corren en 450 cc, por lo que la ventaja que daba antes “Chaleco”, hoy no existe.

El Dakar es una competencia muy larga y extremadamente dura. Todo lo que podamos anticipar desde acá, se ve enfrentado a la realidad extrema de la ruta. Esa es la real verdad. La ruta manda y muchas veces se opone a las expectativas, derribando sueños e ilusiones. Pero, de no mediar inconveniente alguno, la lucha por la parte alta del podio entre Despres, Coma y “Chaleco”, se anticipa como una de las más atractivas y cerradas de los últimos años. Ojalá, por el bien del motociclismo chileno, sea el nuestro el que se imponga. Se lo merece con creces y tiene, además, todas las condiciones. Suerte “Chaleco”. ¡Que te vaya bien!…