La semana pasada se dio a conocer la historia de Abdullah al-Mohammad, un hombre sirio que inventó un juego para que su hija no tuviera miedo cuando caían las bombas en la provincia de Idlib. Por el contrario, logró que la pequeña Salwa riera.

En el video se escuchaba al hombre preguntarle a la niña “¿es un avión o una bomba?”, a lo que esta responde “bomba”. Acto seguido, ella misma agrega que “nos vamos a reír cuando caiga”. Efectivamente eso es lo que ocurre.

En conversación con Sky News, Mohammad afirmó que le enseñó esta dinámica para “protegerla de la crisis psicológica” que otros niños de la comunidad han debido soportar.

Lo cierto es que esta actividad tuvo frutos inesperados en los últimos días, ya que desde Turquía informaron que Abdullah al-Mohammad y su familia habían escapado de Siria y llegado hasta aquel país.

Según detalla el diario español El País, esto se logró luego que el video fuera viralizado y visto por un grupo de familias en Turquia, quienes hicieron gestiones que permitieron que el grupo pudiera ingresar en territorio vecino.

El hombre indicó al citado medio que el pasado martes recibieron una tarjeta especial de parte del gobierno, en la cual se les identifica como refugiados, lo que les permite residir de manera legal por un tiempo determinado.

“Estoy feliz Estamos lejos de la guerra, no hay explosiones, no hay aviones, no hay muerte. Es un sitio nuevo, no tengo trabajo, pero estoy feliz”, confeso emocionado el hombre.

Por el momento, indicó, desde Turquía no están entregando tarjetas de ciudadanía a personas que provengan de Siria, aunque él mismo espera poder solucionar esta situación y buscar algún trabajo que les permita surgir.

Asimismo, al-Mohammad dejó en condicional un posible retorno a su país. “Si la guerra se detiene. Si no, no pienso volver”, expresó.